Cada son más frecuentes los robos de cables de tendido eléctrico y fibra óptica en Trelew. Hay firmas sospechas de una red de comercialización que tendría conexiones con Puerto Madryn, y se llevaría el cobre al centro del país para reciclado. 

Este lunes por la mañana el barrio Corradi amaneció son internet debido a que por segunda vez pocos meses robaron el cableado. En febrero ya les habían robado los cables, la empresa de internet los repuso y este domingo a la noche volvieron a desaparecer.

Las sospechas apuntan a los mismos vecinos del barrio en las inmediaciones de La Calera, donde crece la delincuencia. También el domingo la Policía detuvo a dos jóvenes con rollos de cable en el barrio Amaya. Estos mismos casos se dan con frecuencia en otras zonas de la ciudad.

Los investigadores tendrían apuntados varios lugares estratégicos en barrios periféricos de Trelew donde estarían operando estas células que se dedican al menudeo. Los mismos grupos tendrían vinculaciones con gente que se dedica a la venta clandestina de autopartes.

Desde la Municipalidad dijeron que están preparando una legislación para regular la venta de chatarra, que ayudaría a desenmascarar a esta denominada "mafia del cobre". Algunos de estos centros clandestinos operarían en domicilios particulares, y se requieren órdenes de allanamiento para descubrirlos.

VINCULACIONES Y SOSPECHAS

Hace un par de semanas, la Policía allanó una chatarrera en la avenida Eva Perón en la que hallaron medidores de la Cooperativa Eléctrica y tumbas robadas del Cementerio, y la Municipalidad lo clausuró.

Según las fuentes, el circuito de comercialización tendría fuertes vinculaciones con Puerto Madryn donde al parecer la chatarra y el cobre "se pagan más caro", revelaron.

Los mismos vecinos de la comunidad tendrían detectados varios centros de compra y venta clandestinos. Se cree que en Trelew hay por lo menos 15 comercios -que en su mayoría no están habilitados- que se dedicarían al menudeo del cobre.

La operatoria consiste primero en cortar y quemar los cables para extraer el cobre.De este modo, no hay forma de establecer la procedencia de estos cables, que se confunden con los que descarta la misma ciudadanía. Según las fuentes, si un cable está quemado y cortado "no hay forma de saber si lo robaron o lo descartó algún vecino en un basural".

El interrogante que desvela a los investigadores es a dónde va a parar todo el cobre y la chatarra del menudeo, que se funde y se recicla. Al parecer este circuito, que es muy lucrativo, terminaría en grandes centros urbanos del centro del país como Rosario y Buenos Aires, según creen los investigadores. Pero lo que resulta inexplicable, es cómo salen los camiones con toneladas de cobre sin que nadie los vea.

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