COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Vecinos cercanos al barrio Manantial Rosales, próximos al camino alternativo que une ese sector con el Saavedra, sufrieron este miércoles las consecuencias de la rotura de un antiguo oleoducto que derramó crudo por alrededor de 60 metros, lo que alertó a quienes residen en las cercanías ante el peligro de que se afectara sus viviendas. La semana pasada hubo dos derrames: uno en instalaciones de la operadora Tecpetrol, en Caleta Córdova, y el otro en la empresa Sipetrol, por el cual denunciaron sabotaje.

Uno de los vecinos afectados, Antonio Cifuentes, dijo que la pérdida comenzó poco después del mediodía y luego de las comunicaciones correspondientes con la empresa Central Patagonia –operadora del histórico yacimiento– se envió personal que realizó la excavación correspondiente y una reparación “momentánea” de la pérdida.

Es que “debido a la antigüedad de los caños sería imposible soldar, por lo que solucionaron el problema con una montura”, según le indicaron.

EL PERSONAL “SE OFENDIÓ Y SE RETIRÓ”

Tal como informa este jueves diario Crónica, ante el reclamo por el saneamiento y recupero de la pérdida, además del reclamo para que se levanten los cables de alta tensión que también quedaron afectados por el derrame, “parece que el personal se ofendió y se retiró del lugar, aduciendo que no los dejé tapar con tierra el sector impactado, tal cual era su intención”, agregó.

Luego se convocó a la prensa para que se observara la gravedad de la situación preguntándose si no correspondería a algún sector medioambiental, municipal o provincial actuar ante la contingencia.

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