COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - La confirmación de Sergio Lanziani como secretario de Energía de la Nación, ratificado esta tarde por el presidente electo Alberto Fernández, próximo a la asunción del nuevo gobierno el martes 10 de diciembre, abre una expectativa de alivio para la acuciante situación de las cooperativas de Chubut: el flamante funcionario es el actual ministro de Energía de Misiones, una jurisdicción que encabeza, junto con esta provincia, el ranking de deudores de CAMMESA, que amenaza con embargar cuentas a las distribuidoras del interior del país.
En efecto, tal como informó ADNSUR semanas atrás, Lanziani venía cruzado en una polémica con el gobierno de Macri y la administradora del mercado mayorista eléctrico, que le reclama a la distribuidora de energía de su provincia, EMSA (Energía de Misiones S.A) un monto que al mes de octubre totalizaba 6.383,5 millones de pesos. Las cooperativas chubutenses, con datos a ese mismo mes, sumaban 6.100 millones de pesos, entre las que la SCPL haca punta, con 2.194,8 millones de pesos.
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¿Por qué el nuevo funcionario puede abrir una expectativa favorable? Porque en el cruce de reclamos con la mayorista, argumentó que también ésta adeudaba a su provincia un monto millonario por regalías hidroeléctricas, en base al aprovechamiento de Yaciretá y la porción que corresponde a esa provincia. Esa perspectiva implica una mirada desde el interior y no sólo desde la centralidad que se planteó durante el último gobierno, cuando CAMMESA intimó a las distribuidoras de todo el país pero condonó deudas millonarias a las empresas que prestan el servicio en Buenos Aires, por alrededor de 19.000 millones de pesos.
Vale recordar que también la SCPL reclama acreencias a su favor, en el vínculo con el mercado mayorista, porque hay compensaciones de inversión en obras de infraestructura que no se recibieron en tiempos en que regía el congelamiento tarifario, por lo que el Estado nacional debía financiar obras que las cooperativas no podían afrontar al no poder modificar tarifas. En definitiva, el cambio de paradigma puede favorecer esa postura y achicar en parte la asfixiante presión de la administradora, poniendo en discusión también la aplicación desmedida de intereses sobre la deuda originada en la compra de los bloques de energía.
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El perfil de Lanziani
Lanziani tiene 60 años y es ingeniero nuclear regresado del prestigioso Instituto Balseiro, según reseñó en las últimas horas diario Río Negro. También estudió ingeniería en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) y se perfeccionó en Finanzas, Contabilidad Empresaria, Estudio y Análisis de Proyectos Industriales en la Universidad de Buenos Aires (UBA).
En su carrera profesional fue profesor de la cátedra de Física en la Universidad Nacional de Misiones, investigador en el Centro Atómico Constituyentes, consultor del Banco Mundial en el área de Selección y Ejecución de Proyectos Participativos de Inversión Social.
Por otro lado, su figura no genera entusiasmo en círculos vinculado a la industria petrolera, ya que no proviene específicamente de ese sector y ni tampoco surge desde una provincia vinculada a la actividad hidrocarburífera, lo que seguramente será compensado con la figura que se designe en la Secretaría de Hidrocarburos de la Nación.