RAWSON - La diputada provincial por el FPV, Cecilia Torres Otárola, confesó: “he sido víctima de violencia de género en la vida” y sugirió a quienes sufren el flagelo - "que le pasa a muchas personas" - que deben hablarlo. Durante una entrevista con FM Tiempo Esquel, Torres Otárola remarcó la necesidad de la contención familiar para las víctimas y dijo que "la violencia no debe quedar en una denuncia, porque da para más".
Según explicó, su objetivo es “buscar herramientas de empoderamiento para plasmarlas en una legislación, de manera que los Poderes del Estado tengan las normas y las apliquen”. Reafirmó su expresiones de que “no me van a parar” porque, subrayó, “es una lucha que tengo forjada, más con los últimos sucesos que he pasado en mi vida”.
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“Es una problemática que no se puede banalizar”, dijo e insistió con que “no me van a parar”. Asimismo contó que recibe muchas cartas relacionadas con la violencia de género: “Son mujeres que sufren lo mismo que yo sufrí”, contó. Torres Otárola explicó que “cuando uno analiza el tema en profundidad, encuentra que la violencia está en el ADN de las personas. En la violencia se aprende, se enseña y se vive. Pero a veces no tenemos las herramientas para darle la lucha interna”.
En el mismo sentido la diputada se refirió a una charla que mantuvo con la doctora Ana Ronsenfeld acerca de la violencia de género, y ésta le indicó que “las leyes existen y quizás sólo faltan algunos eslabones”. “Entonces –se preguntó- por qué hacemos oídos sordos y caso omiso; por qué se cajonean expedientes, o por qué a veces se aplican leyes y no se hacen las reglamentaciones”.
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LES OCURRE A MUCHOS
Torres Otárola sugirió instalar el tema, hablarlo, porque “es algo que les pasa a muchas y muchos; esta no es una cuestión de feminismo”. Le sumó la idea de que “en algún momento hay que pensar en un proyecto que vuelva a educarnos como familia, y a ayudar al ser violento a que se recupere”.
Ante la consulta, la legisladora cordillerana explicó que son más las mujeres y hombres que callan sus situaciones, que los que la dicen. “Pueden ser de menor o mayor poder adquisitivo, pero hay violencia de género en todos lados”, puntualizó y acotó que “no lo manifiestan por vergüenza; la misma vergüenza por la que yo pasé”.
Acerca de las cartas que recibe, Cecilia Torres Otárola señaló que “lo más impactante que encuentra en esos escritos es que las mujeres saben que se tienen que ir. Pero no encuentran respaldo. La referencia es a que la atacan psicológicamente advirtiéndoles que sin ellos (los hombres) no pueden subsistir, porque son incapaces”.
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Volvió a su caso de víctima de violencia de género, y aseveró que la fortalecen sus tres hijos, y el hacer las cosas con una gran convicción. Está comprometida con aportar desde la legislación
Fuente: Jornada
