Se defendió a los escobazos de dos delincuentes que quisieron robarle en su trabajo

El hecho ocurrió en Rosario, Santa Fe, cuando un cajero estaba trabajando en un supermercado y dos personas intentaron robarle el dinero que tenía en la caja registradora. El trabajador reaccionó lo más rápido que pudo: agarró lo primero que tenía a mano e intentó darles con el escobillón en la cabeza, algo que no pudo ser.

Hasta ese momento fingieron ser clientes, pero en cierto punto comenzaron a acercarse al cajero para robarle el celular y el efectivo.

Los delincuentes estaban con la cara descubierta y quedaron grabados por las cámaras de seguridad del comercio desde el principio hasta que huyeron del miedo, seguramente sin esperar la reacción violenta.

"Lo estaban manoteando y no soportó la impotencia. Y agarró lo primero que encontró para darles con un palo en la cabeza", comentó Sebastián, dueño del minimarket rosarino.

Diferente a los demás casos de inseguridad en esa ciudad, estos salieron corriendo evidentemente con miedo. "No es lo que pasa generalmente. No les importa si les vemos las caras a través de las cámaras", continuó. "Entraron a robar sin armas. Conocen la situación que atraviesa Rosario. La gente tiene mucho miedo y se aprovechan de eso. Lamentablemente ya nos acostumbramos a vivir con miedo", concluyó el propietario del comercio.