Los vecinos del barrio Antártida Argentina en Cipolletti, ubicado cerca del Estadio Polideportivo Municipal y el hospital Pedro Moguillansky, se encuentran en estado de alerta debido a la aparición de un grupo de jóvenes ladrones que emplean una táctica insólita: roban con la compañía de un perro de raza Pitbull.
Los vecinos sospechan que estos delincuentes utilizan al animal, de pelaje gris, para distraer a las mascotas de las viviendas y, de esta manera, facilitar la ejecución de robos y hurtos. La técnica consiste en encolerizar a los perros residentes, provocando un alboroto que los ocupantes interpretan como una reacción normal ante la presencia de otro perro. Esta falsa alarma desarma la percepción de peligro y deja el terreno libre para que los ladrones cometan sus fechorías, según testimonios recabados durante los últimos meses.
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El fin de semana pasado, una mujer residente en las cercanías de Rotary Internacional y Río Neuquén fue testigo de una situación sospechosa. Alrededor de las 2:30 de la madrugada, escuchó fuertes ladridos y salió a la vereda, donde observó a dos individuos con el mencionado Pitbull. Un tercer sujeto se unió al grupo, aparentando ser amigos inocentes. Sin embargo, al notar que la residente estaba en alerta, los sospechosos optaron por retirarse en medio de la oscuridad.
Los vecinos sostienen que este modus operandi se repitió en noches anteriores, generando mayor cautela entre los residentes. Además, relataron un caso en el que intentaron ingresar a una vivienda y presumen que los ladrones tenían una llave, ya que días antes habían robado una mochila con un llavero completo a la moradora. Afortunadamente, la cerradura fue cambiada a tiempo. Las cámaras de seguridad captaron el intento de ingreso, identificando a dos delincuentes.