Un insólito hecho sorpendió a las redes en las últimas horas, luego de que se conociera que un curandero pakistaní clavó un clavo en la cabeza de una mujer embarazada para garantizarle que su hijo sería varón.

Ocurrió en Peshawar, en el noroeste del país medioriental, y donde la mujer acudió de urgencias a un hospital local tras haber intentado quitar ella misma el objeto.

"Estaba totalmente consciente, pero sufría mucho", explicó al respecto el doctor Haider Khan, que la trató.

Según se supo, una radiografía mostró que el objeto se había adentrado 5 centímetros en el cráneo de la protagonista de la historia, pero no había llegado al cerebro.

Ante esta situación la policía pakistaní busca interrogar a la mujer. "Pronto pondremos nuestras manos en el hechicero", prometió el jefe de la policía Abbas Ahsan.

Cabe destacar que en Pakistán los curanderos que utilizan prácticas ancladas en la mística sufí son muy comunes, pese a que varias escuelas islámicas desaprueban este tipo de rituales en el país de mayoría musulmana.

En Asia meridional, además, tener un hijo varón es considerado un buen presagio dado que se cree que una vez adulto puede garantizar el futuro financiero de su familia.

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