Una mujer pagó una elevada suma para salvar a un ternero que vendían para las fiestas

Una proteccionista pagó una elevada cifra para salvar a un ternero que vendían para las fiestas. Días atrás vio una publicación en un grupo de Facebook, donde vendían al animal de unos 90 kilos para consumirlo en la cena de Nochebuena o Año Nuevo. Las imágenes lo mostraban con bastante deterioro. Sin dudar fue hasta el campo donde se encontraba y lo compró. 

María Laura Gomar nació en Buenos Aires y se crió en Mar del Plata, donde vive actualmente. Tiene más de 60 animales a su cargo en diferentes guarderías y hogares de tránsito, en una importante red que consiguió a través de los años. 

María Laura fue a buscar el ternero que bautizó “Mitch”, por el que le cobraron $80.000 en efectivo. Las condiciones del animal la obligaron a invertir otros $90.000 para el alimento especial y suplemento alimentario. 

Lo primero que hizo cuando subió al vehículo con el ternero recién adquirido y al que salvó de ser carneado para las fiestas fue abrazarlo y llenarlo de mimos como si fuera un animal doméstico. Mitch se encuentra en una casa particular, de una amiga de María Laura. 

Según declaró la mujer a Infobae, el animal será trasladado a un santuario Sierra del Cielo, en Córdoba, donde viven 250 animales y cuya madrina es la modelo Liz Solari. Para esto debió encarar otra de las muchas colectas a las que está habituada ya que el traslado desde Mar del Plata hasta Córdoba tiene un valor aproximado de 400 mil pesos.

“Esto es una cuestión de convicción”, sentenció la proteccionista, que además es vegetariana. Gomar afirma que respeta las decisiones ajenas en torno a la alimentación, la publicación de la venta del ternero le causó angustia debido a los comentarios “crueles y dañinos”.

UNA NUEVA VIDA 

Mitch vivirá en un lugar ideal, con infraestructura adecuada y un equipo de voluntarios y veterinarios que se ocuparán de el. 

“Que viva libre, sano, feliz. Que no lo maten para ponerlo sobre una mesa navideña”, señaló como deseo y aseguró que ese fue el motor de su odisea. Jamás imaginó que su accionar iba a tener tanta repercusión pública.

Hoy, mientras reúne el dinero necesario para el traslado a Córdoba, gracias a la mucha gente solidaria de Mar del Plata, asegura que Mitch está totalmente domesticado, que duerme en el interior de la vivienda y que responde a su llamado cada vez que le lleva la leche.

“Tampoco quiero que se acostumbre a esto porque sé que no será la vida que tendrá. Está encariñado y muy domesticado, pero entiendo que pronto será un toro gigante, crece a pasos agigantados y su hábitat es el campo y las pasturas”, sostuvo.

“Cada cual tiene su elección y respeto todas las formas de pensar. Pero quiero que se entienda que los animales son seres vivientes que sufren a la par de los humanos y que debemos actuar con responsabilidad”.