PUERTO DESEADO (ADNSUR) - Tras una semana de navegación, este domingo arribó a Puerto Deseado el mítico velero La Sanmartiniana, la embarcación que había partido desde Puerto Argentino con seis tripulantes debió ser remolcada hasta el muelle de esa ciudad ya que se encontraba sin propulsión. El barco fue recibido en rada por el intendente Gustavo González y el presidente de FIPCA, Julio César Urien, Juan Scotti del SUTAP, Miguel Ángel Prudente, responsable del MPR Quebracho, y en tierra por un grupo de militantes que viajaron para la ocasión.
Foto: Crónica
Este lunes a la tarde la tripulación encabezada por el Capitán Heraldo Wettstein y Enrique Estévez, Manuel Benzi, Jose Bjerring, Carlos Bertola y Héctor Casenave, junto a Urien brindaron una conferencia de prensa en la Sala San Martín del municipio local donde relataron el estado en que fue hallada la nave, las reparaciones que se le hicieron para salir y la travesía de un viaje que duró seis días, navegando sin motor y con tormentas de mediana intensidad que los obligó a mantenerse en alerta.
Durante el fin de semana hubo dos alcoholemias positivas en Comodoro
Según explicó Urien a Diario Crónica, la embarcación será sometida a una reparación general en la localidad y luego adoptará Deseado como puerto de asiento en los meses de verano desde donde continuará su recorrida por los puertos patagónicos. El presidente de FIPCA, (Fundación Interactiva para la Preservación del Agua) explicó que la embarcación pertenece a la militancia y a partir de ahora comenzará una nueva etapa con mayor presencia en el mar. Sostuvo que el rescate de la embarcación salió 10 mil dólares que fueron cobrados solo en concepto de estadía en el puerto y no así por el rescate acontecido a varias millas de la Islas luego de que el barco quedara a la deriva.
En cuanto al costo que de la reparación de la nave, Urien explicó que será costeado gracias con el apoyo del municipio de Puerto Deseado y la ayuda de sindicatos y asociaciones amigas “porque desde el Gobierno Nacional no esperamos nada y no pedimos nada”. Cabe acotar que la nave permaneció largos meses en Malvinas después de quedar a la deriva cerca de la Isla de los Estados, cuando por la acción de los fuertes vientos cortó las amarras mientras era rescatada por el Pesquero San Arawa.
