El Covid sigue sorprendiendo. Cuando Comodoro Rivadavia vivía un verano relajado, sin pacientes internados y muertes esporádicas, en un abrir y cerrar de ojos todo explotó y la tranquilidad se convirtió en una tensa calma que hoy despierta varios interrogantes.

Es que a fuerza de ser sincero, los 422 casos que se registraron el viernes, sumando 1054 casos en siete días, no se refleja puertas adentro del sistema sanitario, por lo menos en lo que respecta a internaciones en sala común y terapia intensiva Covid; aunque si lo hace en el interior de los pasillos, por la cantidad de personal de salud que se contagió en los últimos días.

Si algo se vio en las largas filas que hubo en el Plan Detectar esta semana, es que esta tercera ola sorprendió a todos, y no distinguió edades, tanto adultos como adolescentes, que son quienes suelen concurrir a eventos masivos, donde no se respeta distanciamiento social ni uso de tapabocas.

Por supuesto no se trata de echar culpas a un grupo minoritario. Las fiestas de fin año igual hicieron de las suyas, y esta vez, a diferencia del año pasado, muchos no escatimaron abrazos ni besos. Es que después de dos años de pandemia, y en medio de un periodo de relajación quién iba a pensar que la tercera ola iba a llegar entre Papá Noel y los Reyes Magos.

En los diferentes centros de hisopados se vieron largas filas durante toda la semana.
En los diferentes centros de hisopados se vieron largas filas durante toda la semana.

LAS CERTEZAS QUE SE TIENEN

Es cierto que hoy no hay rigor científico para decir que la variante que afecta a Comodoro Rivadavia es la Ómicron, aquella que explotó en Córdoba en los últimos días de diciembre. 

Los resultados de las 30 muestras que envió el Área Programática Sur, del Ministerio de Salud de Chubut, al Instituto Malbrán para ser secuenciadas todavía no fueron enviados desde Buenos Aires, y a ciencia cierta no se puede confirmar que esa variante sea la que explotó en la ciudad. Sin embargo, todos los indicios afirman lo contrario, tanto que el propio gobierno, a través del ministro de Salud Fabián Puratich, admitió que la explosión de contagios se debe a la llegada de esa variante. 

La última semana, la infectóloga Emilia Villibar, coordinadora de la División Epidemiología y Patologías Prevalentes del Hospital Regional, habló con ADNSUR respecto a esta situación que vive Chubut, y en ese sentido coincidió con el ministro. “Suponemos que este incremento de casos tiene que ver con la variante Omicrón, en esta tercera ola. En nuestro caso las muestras fueron enviadas hace más de un mes pero todavía no tenemos resultados. Lo que sí podemos ver es que tiene alta contagiosidad”, dijo la médica que llegó a Comodoro a mediados del 2020.

Y hablando de certezas, esta variante si arrojó algunos indicios comunes que marcan la pauta de cómo se podría vivir esta tercera ola. Como dice Villibar, la cepa tiene alta contagiosidad, incluso más que el sarampión, indican estudios internacionales.

También es más rápido el inicio de los síntomas, que aparecen entre 24 y 48 horas después del contacto. Por eso esta semana quienes trabajaron en el Control de Foco de los casos positivos advirtieron una situación común a la mayoría: sus contactos estrechos dieron positivo, uno o dos días después de ser diagnosticado el caso principal

Respecto a los síntomas también varían de la segunda ola. Esta vez en muy pocos casos hay pérdida de gusto y olfato y fiebre, pero sí aparecen en forma aguda otros síntomas, que afectan principalmente la vía superior. 

En ese sentido, Villibar confirmó en la entrevista de la última semana, que la mayoría de los pacientes sintieron síntomas similares: dolor de garganta, rinorrea (agua por la nariz), cefalea y mialgia (dolor de cuerpo), principalmente en la zona lumbar

LAS DUDAS QUE QUEDAN

Como el sistema colapsó ante una demanda exponencial, y un sistema en estado de relajación por el buen presente que se vivía, puertas adentro del sistema sanitario entienden que hay muchos más casos positivos de los que se conocen. Es que por estos días, gente de todas las edades se acercó a los disposición de testeos, pero no pudo ser atendida por la alta demanda. Así, el gobierno de Chubut, este viernes, pidió que los casos confirmados por criterio clínico-epidemiológico se autoreporten en la app Cuidar, mientras que en Comodoro se confirmó la apertura de un nuevo puesto de hisopados: la escuela 749, conocida popularmente como ex ENET N°1.

Por otro lado, en este marco, y siempre pensando en lo que sucedió en la primera y segunda, una de las mayores preocupaciones de la última semana fueron las posibles medidas de restricción que se podrían aplicar en la ciudad ante el incremento de casos. 

Dos días antes de Año Nuevo, el Comité de Crisis de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly analizó la situación en la zona. Ese día, estuvieron presentes autoridades del Área Programática Sur, pero también de las municipalidades de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly.

Allí se planteó la posibilidad de realizar algún encuentro con la Cámara hotelera y gastronómica, y también la necesidad de controlar e hisopar a los estudiantes que volvían de viaje de egresados, luego que se detectaron 14 casos en dos contingentes que obligaron a aislar a más de 300 chicos. 

Lo cierto, es que al cierre de la semana de mayor contagios desde los últimos meses, no se analizan medidas restrictivas. La razón es lo que señalamos al principio; el incremento de casos no se refleja en ocupación de camas de internación y terapia intensiva, y tampoco en muertes.

Desde la Municipalidad, al ser consultados por ADNSUR, indicaron que por el momento no se van a aplicar restricciones ni suspender actividades, y se aguardará posibles medidas que se tomen a nivel nacional y provincial, a fin de cuentas son las autoridades de aplicación en materia de salud.

Por supuesto las decisiones dependerán de cómo evolucione la curva de contagios y su gravedad. 

Desde el Área Programática Sur, en tanto, aseguraron que hoy las únicas medidas que se deben implementar en lo inmediato es el aumento de la vacunación Covid, apelando a la responsabilidad de la comunidad, y el testeo de pacientes con síntomas, apuntando al aislamiento de los positivos y los contactos estrechos.

Ambas medidas tienen sentido, principalmente por la forma de contagio de esta variante, que obliga a tomar mayores recaudos, pero también porque el sistema de salud no duda en afirmar que la vacunación Covid es la explicación a la ausencia de casos graves. Es que como dijeron desde un principio de la campaña, que comenzó en diciembre de 2020 antes de la segunda ola, la vacunación no evita la enfermedad pero si previene un cuadro grave que derive en una internación.

Por eso, el objetivo de este verano 2022 apunta a seguir completando esquemas, tanto en adultos como niños, y concientizar sobre la importancia de la dosis adicional y de refuerzo, esperando que el impacto de esta tercera ola acabe antes que el verano, para así estar más fuertes ante la llegada del invierno.

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