A 119 años del desembarco de los primeros inmigrantes Boers en la Patagonia
Un 4 de junio de 1902 llegaba a las costas de Comodoro Rivadavia el primer contingente de sudafricanos, denominados boers. Emigraron a Argentina después de la Segunda Guerra Anglo-Boer en busca de un mejor futuro, rechazando la idea de vivir en su tierra bajo mando británico.
Un grupo de hombres y mujeres llegó a Comodoro Rivadavia el 4 de Junio de 1902. En 1903, 1905 y 1907 llegaron contingentes aún más numerosos que provenían en su mayoría de Transvaal y el Estado Libre de Orange, Sudáfrica.
El primer asentamiento bóers de la Patagonia, se asentó en Colonia Escalante, y se dedicaron a la cría de ganado lanar u ovino, construyeron caminos y se adentraron en los campos. En 1903 transportaron en carreta por primera vez su productos al pueblo para comercializarlos.
Impulsaron las primeras perforaciones para extracción de agua para Comodoro Rivadavia y sus alrededores. Gracias a esas primeras solicitudes al Gobierno Nacional para traer las máquinas perforadoras fue el descubrimiento del petróleo. El agua captada en 1912 por YPF, abastecen aun hoy a la población de Comodoro Rivadavia y sus alrededores, en honor a su 1º poblador, desde ese momento se lo llama “Manantiales Behr”.
La llegada de este primer contingente, se produjo después del conflicto que se había desatado entre las repúblicas boers y los estados soberanos que han sido creados por el Imperio Británico, que desembocó en una guerra entre los años 1899 y 1902.
Tras la victoria de los británicos, los boers debieron optar entre el sometimiento y el exilio, por lo que una gran parte de ellos buscaron una nueva tierra que los albergue, siendo nuestro país uno de los lugares elegidos, gracias a sus políticas inmigrantes ya su vasto territorio al que los gobernantes de la época invitaban a extranjeros a poblarlo.
Se dedicaron a la agricultura y a la ganadería, cultivaban cereales, verduras, criaban aves, producían lanas y queso. La colonia tenía treinta días de viaje hasta la capital petrolera, y lo hacían en carros tirados por bueyes. Los pioneros sudafricanos eran gente propia del campo, y se sumaron al esfuerzo de empujar el crecimiento de Comodoro.
En el año 2000, la Comisión Directiva comienza a realizar un padrón de inmigrantes y sus descendientes, junto a historias familiares y es así que en el año 2002 se concreta el tan anhelado libro “En las tierras del viento, última travesía boer” de las autoras Liliana Esther Peralta y María Laura Morón.
En el año 2002 se construye el Monumento homenaje a los Pioneros Sudafricanos en Av. Alsina y Rawson.
El 6 de mayo del año 2017 fue inaugurado el Museo Boer, biblioteca y sala de reuniones en la Sede de la Asociación Cristiana de la Colectividad Sudafricana sita en la Ciudad de Rada Tilly, un sueño muy anhelado de los descendientes que trabajan día a día para preservar su historia, tradiciones y cultura a lo largo de tantos años en ésta bendita tierra de paz que los cobijo.