COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) – Pablo Rodríguez, más conocido como “Chipi”, de 24 años, prendió fuego su celda y debió ser hospitalizado en terapia intensiva en el Hospital Zonal de Trelew. Se encuentra en coma inducido tras la inhalación de monóxido de carbono. El joven condenado por robos cumple condena en el nuevo Instituto Penitenciario Provincial y semanas atrás había solicitado su traslado a Comodoro para estar cerca de su familia ya que iba a ser papá y su padre está muy enfermo. El reo está fuera de peligro y cuando se reponga será trasladado a la alcaidía local.
El joven protagonizó una huelga de hambre que terminó el lunes cuando le informaron que el juez de ejecución, Jorge Odorisio, había autorizado su pedido.
Foto: ilustrativa
El recluso, quien se encuentra bajo tratamiento por adicciones, además de inhalar monóxido de carbono sufrió quemaduras leves en uno de sus miembros superiores.
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Según el director de Seguridad de la Jefatura de Policía, comisario mayor Elvio González, el joven “tomó la decisión de prender fuego el colchón de su celda. Esto le provocó una quemadura leve en uno de los brazos pero al inhalar el humo le afecto las vías respiratorias y por esa razón ahora está en el hospital en observación”.
Explicó que el episodio no pasó a mayores y fue como método de protesta porque no lo trasladaban a un centro de detención de Comodoro.
“En este caso no se llegó a activar la alarma anti-siniestros con la que cuenta el lugar porque la policía intervino en forma inmediata y lo pudo sacar enseguida. De haberse activado el sistema sería muchísima el agua que estaríamos sacando de adentro”, comentó.
En febrero del 2010, “Chipi” baleó a un policía en un asalto al restaurante Hottys, ubicado frente al Hospital Regional.
Años después fue acusado de varios robos a mano armada e incluso lo denunciaron sus propios familiares por amenazas a su madre y hermana.
