La Justicia procesó a Teto Medina por "abuso sexual reiterado" y amenazas contra su expareja
Así lo resolvió Martín Del Viso, juez nacional en lo Criminal y Correccional 28. Además, el ex conductor fue embargado por una cifra millonaria. Los hechos ocurrieron en el año 2019.
La Justicia procesó a Teto Medina por "abuso sexual reiterado" y amenazas contra su expareja, en hechos ocurridos en el año 2019. Así lo resolvió Martín Del Viso, juez nacional en lo Criminal y Correccional 28. Además, el exconductor de 61 años fue embargado por una cifra que supera los $20 millones de pesos y tiene una orden de restricción de acercamiento.
Cabe señalar que Medina fue imputado por cuatro hechos. Uno ocurrió en un hotel alojamiento del barrio de Villa del Parque, Ciudad de Buenos Aires; otro en un hotel de Palermo; otro en una casa de la localidad bonaerense de José Mármol y el último, donde mostró armas, mientras circulaban en un auto por la Capital Federal.
En la resolución, el juez recordó toda la situación judicial hasta recaer en su juzgado. Asimismo, explicó que la fiscalía que realizaba investigación dictaminó a favor del sobreseimiento de Medina. De esta manera, avanzó con el impulso de la querella a cargo del abogado Alejandro Cipolla. Por otra parte, Del Viso reveló en su escrito que la víctima manifestó que “Medina tenía muchas actitudes retorcidas durante la práctica sexual”
LAS MEDIDAS CONTRA MEDINA
Según informó Télam, el exconductor además de ser procesado, fue embargado por $20.258.430 de pesos y enfrenta una orden de restricción de acercamiento de 500 metros con la víctima y su familia, mientras dure el proceso, según la Ley 26.485 de Protección Integral de la Mujer. Asimismo, no puede contactarse por “teléfonos fijos o celulares, el envío de mensajes de texto, WhatsApp, correo electrónico, Facebook, Tik Tok y/u otras redes sociales, o por intermedio de terceras personas”.
“El comportamiento denunciado asume una clara modalidad de violencia física, psicológica y principalmente sexual”, explicó el juez nacional en lo Criminal y Correccional 28.
“Son ciertas las complejidades que presentan los delitos de la especie, pues en su mayoría ocurren en ámbitos de la intimidad desprovistos a priori de otras pruebas que no fuera la denuncia de la agraviada”, agregó.
En tanto, sostuvo que “la versión de la querellante se mostró, aún con sus vaivenes, siempre orientada en dar a conocer su padecer y si bien pudo incurrir en ciertas inconsistencias no debe olvidarse que debió referirse en más de una ocasión a situaciones que fueran disruptivas para su psiquismo, pues así lo dio a entender su propio terapeuta”. “Brindó un detallado cuadro de los ataques que padeciera a instancias del imputado y pudo ubicarlos en tiempo y espacio”, señaló Del Viso.
Mientras que Teto Medina, durante sus declaraciones indagatorias, sostuvo que las denuncias eran falsas y se debían a “despecho”. En cuanto a las prácticas sexuales que mantuvo con la víctima, reveló que siempre fueron con consentimiento. Sin embargo, el juez descartó esa situación, al creer en la palabra de la víctima y en las “secuelas que padeciera”.
“Para volver al consentimiento que Medina dijo ha mediado en cada encuentro con Fernández, entiendo que su ausencia no solo despunta de lo expresado por la propia mujer en este sentido y cuya negativa debe ser evaluada con la amplitud probatoria que exige la ley 26.485, sino que la argumentación de la defensa resulta contradictoria con las constancias de la causa”
“Si bien no existieron testigos directos de los hechos, propio a la naturaleza de los casos en los que se victimiza sexualmente a una mujer, debe decirse que no se advierten señales que habiliten a dudar sobre la versión de la víctima. Por el contrario, se acumularon suficientes indicios serios, graves y concordantes que convencen sobre la positiva ocurrencia de los sucesos”, sostuvo el juez durante su resolución.
LOS PROBLEMAS JUDICIALES DE MEDINA
Cabe recordar que durante septiembre de 2022, el exconductor había sido detenido durante seis días por formar parte de la organización “La Razón de Vivir”, una comunidad terapéutica para ayudar a rehabilitar personas dependientes a las drogas. Sin embargo, el espacio recibió denuncias por explotación y trabajos forzados. De esta manera, Teto Medina fue acusado por “asociación ilícita, reducción a la servidumbre, trabajo forzoso, abandono de persona y usurpación de autoridad y de título”. Si bien fue excarcelado, continúa ligado a esa causa y actualmente está bajo la revisión de la Suprema Corte de Justicia de Buenos Aires con posibilidad de pasar al fuero federal por presunta “trata de personas”.