RÍO GALLEGOS (ADNSUR) - El hecho sucedió en la tarde del domingo y fue denunciado en la mañana del lunes, cuando el encargado de cuidar la estancia “Ana” fue rescatado por el hermano que lo había ido a visitar. Según contó el hombre, cuatros sujetos, tres encapuchados y el otro a cara descubierta, lo amenazaron con armas de fuego. Sólo se llevaron una caja de herramientas y el cargador de un rifle. Buscaron el dinero con picos y palas.

El lunes por la mañana, el personal policial de El Calafate comenzó una ardua investigación para poder dar con los cuatro sujetos que ingresaron a la estancia “Ana”, ubicada a unos 90 kilómetros de la villa turística, camino a Río Gallegos, propiedad perteneciente al empresario Lázaro Báez, en donde asaltaron al cuidador.

Según informa Tiempo Sur, los cuatro delincuentes ingresaron cerca de las 18:00 del domingo al establecimiento rural y le habrían dicho al cuidador que no tenían nada contra él, pero que se tirara al piso amenazándolo con un arma de fuego, al parecer, calibre 9 milímetros.

El hombre accedió y fue esposado en una de las habitaciones del lugar.

Foto: Ahora Calafate

PICO Y PALA

Además se conoció que los delincuentes -tres de los cuales actuaron encapuchados y uno a cara descubierta- luego de reducir al empleado rural, comenzaron a buscar en las paredes y techo de la estancia dinero en efectivo, utilizando picos y palas, por lo que se estima que habrían estado allí largas horas, pero al no lograr encontrar lo que buscaban se conformaron con una caja de herramientas y un cargador de rifle calibre 22, para luego retirarse del lugar.

Horas más tarde, el hermano del cuidador se habría presentado en la estancia para visitarlo, momento en el que encontró el desorden y la destrucción del lugar y tras revisar las habitaciones logró encontrar al cuidador, a quien lo llevó a la estancia vecina “Cruz Aike”, que también pertenece al empresario detenido.

Ahí se le dio aviso al administrador de los establecimientos rurales y éste fue quien dio aviso a la policía.

PERICIAS

Ya con la denuncia realizada, el personal policial junto a sus pares de la División Criminalística, se acercaron y realizaron las pericias del caso.

Además de tomar una secuencia fotográfica de todos los ambientes del establecimiento, también se secuestraron elementos que son de interés para la causa que se investiga, informó el mismo diario santacruceño.

Por el hecho se solicitó al personal de la División de Investigaciones de la policía para que colaboren con las investigaciones del caso.

Además se dio aviso de lo sucedido al Juzgado de Instrucción y del Menor de EL Calafate, a cargo del Dr. Carlos Narvarte.

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