El pasado jueves por la tarde, hubo una amenaza de bomba en una escuela de Chubut. Allí, un padre realizó un llamado telefónico y cansado por el bullying a su hijo, sorprendió con sus intenciones de activar una supuesta bomba colocada en el lugar.

El hecho sucedió a las 14:30 horas en la Escuela Nº 714 Julio Cortázar, ubicada sobre la calle Rawson, en la ciudad de Trelew

"Recibimos una convocatoria a través del comando radioeléctrico de una escuela. Solicitaban la presencia policial por una amenaza de bomba", explicó Gabriel Andrés Araujo , jefe de la unidad regional de Trelew a ADNSUR.

"Se constituye el personal policial, se entrevista con una preceptora quien habría recibido un llamado telefónico por parte de una voz masculina que indica que su hijo había sido objeto de bullying. Esta persona alude que si no le solucionan el problema, iba a hacer activar un artefacto explosivo", añadió.

“Activamos un protocolo. Se tuvo que desalojar todo el establecimiento educativo, se tuvo que acordonar las calles en un radio determinado y el trabajo de la división de explosivos llevó aproximadamente dos horas y media”, agregó el comisario.

El hecho sucedió en la Escuela Nº 714 Julio Cortázar, de la ciudad de Trelew
El hecho sucedió en la Escuela Nº 714 Julio Cortázar, de la ciudad de Trelew

Pero confirmó que tras el reglamento, “no hubo ningún artefacto explosivo”. Sin embargo, sostuvo que se hizo una actuación judicial correspondiente y hay una investigación en trámite.

Por otra parte, el jefe de la unidad regional de Trelew se refirió al llamado y aseguró que “el padre no se identificó”, pero “podría ser uno de los cursos inferiores”, aunque insistió en que recién se está trabajando en la parte investigativa.

 Asimismo, remarcó que “también tiene que haber un trabajo por parte de la escuela, del equipo de gestión educativa, de los directivos, para establecer bien si esta situación está ocurriendo en algún curso y ha llamado la atención”.

Por otra lado, sostuvo que el llamado telefónico y la amenaza, “constituye un delito”. Además, "el despliegue de recurso humano que se hace cuando surgen estas situaciones. Y toda la situación que contempla, o sea, hacer una evacuación de todo el alumnado, el personal docente, no docente, el personal operativo de la escuela. Hay que desalojar todo, completo".

“La investigación continúa, se tiene que individualizar a la persona que llamó, porque esto es un delito y no podemos descartar absolutamente nada”, concluyó Araujo.

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