RIO GALLEGOS - Mientras desde el Ministerio de Energía se retrasa el envío del convenio entre la Provincia de Santa cruz y el Gobierno Nacional para que sea ratificado por la Legislatura con las nuevas condiciones para la construcción de las represas hidroeléctricas, este viernes nuevamente el grupo de organizaciones ambientales insistió ante el Gobierno Nacional para que se suspenda la obra. Aseguran que “es un mal negocio desde lo técnico, ambiental, económico y social”, y proponen un cambio de paradigma que apunte a las energías renovables.
“Las grandes represas tienen un alto impacto sobre el medio ambiente y una escasa vida útil por la acumulación de sedimentos que las deja inoperables”, sostuvo la coalición integrada por Aves Argentinas, Banco de Bosques, Flora y Fauna, y las fundaciones Ambiente y Recursos Naturales (FARN), Naturaleza para el Futuro (FuNaFu) y Vida Silvestre Argentina (FVSA).
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Las disrupciones en los flujos de agua, advirtieron los ambientalistas, “contribuyen sustancialmente a la destrucción de pesquerías, la extinción de especies y la pérdida generalizada de servicios ecosistémicos de los cuales depende la economía humana”.
El nuevo paradigma que proponen es el de las energías renovables, por lo que llamaron a superar el mito de que éstas “nunca satisfarán más que una ínfima parte de la demanda” y exigieron al Estado cumplir con los “compromisos pre-electorales” al respecto y con “políticas de eficiencia energética”.
En este sentido, la coalición exigió impulsar una política de eficiencia energética que contribuya a la reducción de las emisiones de GEI, proteger los recursos no renovables y favorecer que los servicios energéticos se brinden a un menor costo y, de esta manera, también a cuidar la economía. “El potencial de ahorro estimado a 2030 se encuentra entre el 20% y 30% en relación con la demanda estimada, de continuar con las prácticas actuales”, indicó la coalición en entidades ambientales. La Opinión Austral
