COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Ante la disminución de las precipitaciones en zona cordillerana, el integrante de la agencia INTA de Esquel e ingeniero agrónomo Eduardo Eloy planteó en Actualidad 2.0 las dificultades para la apertura de la temporada en La Hoya porque “ya tenemos perdido un mes de nieve”. Además, indicó que “el problema que veo a futuro es que vamos a tener una disminución importante en los caudales de los ríos”. Lamentó que podríamos llegar a "otro récord en el Colhué con el problema de que se ha activado un médano de tamaño considerable que no sólo afecta al borde del lago, sino que también hubo casos en los que se tuvieron que suspender vuelos por la enorme cantidad de polvo en suspensión que genera, sin mencionar los problemas que puede ocasionar en el abastecimiento de agua en Comodoro y Caleta”. ADNSUR mostró en mayo pasado la sequía del Cohué Huapi en imágenes.
Finalmente, se suspendió el paro de colectivos
Médanos de arenas finas listos para avanzar al primer viento
Eloy destacó que la falta de precipitaciones forma parte de un “fenómeno que se atribuye al efecto final de “El niño” que está finalizando en este momento”.
El pronóstico “va a continuar hasta agosto y después será una incógnita. Viene con temperaturas máximas de modo que la poca precipitación cae y no se logra la nieve; y los caudales de los ríos están por debajo de lo normal”, planteó el ingeniero.
Además, Eloy destacó que “todo esto indica que vamos a sufrir en la provincia una disminución importante en los caudales del Senguer”. A ello se suma que “ya tenemos perdido un mes de nieve. Más allá del impacto económico, también está el del turismo”, remarcó.
“Y el problema que veo a futuro es que vamos a tener una disminución importante en los caudales de los ríos”, remarcó.
Eloy planteó que “la superficie actual medida en enero era del 45% de superficie promedio. Este es el tercer mínimo histórico, el anterior fue el año pasado y el primero fue en el 2009. Si esto sigue así y el pronóstico tiene razón, vamos a llegar a otro récord en el Colhué con el problema de que se ha activado un médano de tamaño considerable que no sólo afecta al borde del lago, sino que también hubo casos en los que se tuvieron que suspender vuelos por la enorme cantidad de polvo en suspensión que genera, sin mencionar los problemas que puede ocasionar en el abastecimiento de agua en Comodoro y Caleta”, advirtió.
Por tal motivo, consideró que “julio y agosto son cruciales. Si retomamos la normalidad, todo esto podría cambiar, pero la probabilidad de que esto pase es relativamente baja”.
