En un clima de creciente tensión entre el Gobierno y el sindicato de Camioneros, el ministro del Interior, Guillermo Francos, arremetió contra el dirigente sindical Pablo Moyano, tras las amenazas de este último de ir a un paro si el Gobierno no homologa el acuerdo paritario del gremio. La disputa se centra en el porcentaje de aumento salarial, que según el sindicato se acordó en un 25% en marzo y un 20% en abril, cifras que superan las directrices del Gobierno en materia inflacionaria.
“Los argentinos están hartos de las patoteadas de los Moyano”, afirmó Francos en declaraciones a Radio Rivadavia, reflejando el hartazgo del Gobierno y, según él, de la población ante las constantes presiones del sindicato. El funcionario destacó que el Gobierno "hará lo que tenga que hacer" frente a las medidas que tome el gremio, dejando entrever la posibilidad de un conflicto prolongado.
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El enfrentamiento se da en un contexto donde el ministro de Economía, Luis Caputo, había señalado que no se convalidarán aumentos paritarios que superen las expectativas de inflación del Gobierno, buscando mantener cierto control sobre la economía en tiempos de incertidumbre.
La posibilidad de recurrir a la conciliación obligatoria se mantiene sobre la mesa, según Francos, quien la considera “una herramienta de Gobierno para en estas situaciones de crisis gremial”.
En otro orden de cosas, el ministro del Interior también tocó temas fiscales relevantes, como el ajuste en el impuesto a las Ganancias, anticipando que el piso del gravamen oscilará entre $1.200.000 y $1.500.000.