CAPITAL FEDERAL - El gobierno nacional y las principales operadoras petroleras del país comenzaron a discutir una baja en el precio interno del barril de petróleo, que para el crudo Escalante es de 54,90 dólares y el Medanito de 67 dólares, mientras la cotización internacional se mantiene por debajo de los 45 dólares. Mientras se avanza hacia la liberación de precios, crecen las dudas sobre la sostenibilidad de proyectos particularmente en la cuenca del golfo San Jorge, por lo que a fines de este año el escenario podría tornarse aun más complejo. Los productores interpretan que con el petróleo local cerca de los 50 dólares muchos de los proyectos de extracción de crudo en Santa Cruz y Chubut se tornarán inviables.
Según anticipa el sitio El Inversor Online, funcionarios del Ministerio de Energía se reunieron con ejecutivos petroleros del máximo nivel para empezar a discutir cuál será el precio del petróleo en el mercado interno durante el último cuatrimestre del año y fundamentalmente durante 2017. El tema en análisis fue la inconveniencia de avanzar en un nuevo aumento de combustibles, del orden del 6%, que estaba previsto para el mes de agosto, en un contexto en el que el humor popular está erosionado por los aumentos de tarifa y se discute judicialmente su legalidad.
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Los precios de referencia en el mercado interno se mantienen principalmente en base a las tarifas de combustible, de allí que la dificultad para seguir aplicando aumentos (estaba prevista otra suba para noviembre, además de la fijada para agosto) haría inviable mantener las referencias en los niveles actuales.
En rigor, la mayor parte de los actores de la industria dan por sentado que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, apunta a liberar el mercado desde fines de este año, por lo que a partir de 2017 el mercado interno estaría alineado con lo que muestre la cotización internacional del petróleo. Funcionarios de máximo nivel de esa cartera entienden que el esquema de sostener un precio diferencial del barril no trajo los resultados esperados porque la inversión real cayó en los yacimientos y tampoco se logró avanzar en la reducción de los costos operativos en los campos; el principal desafío que tiene por delante el upstream de hidrocarburos.
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Según afirma la publicación especializada, las principales productoras del país –con YPF, Pan American Energy (PAE), Pluspetrol y Tecpetrol- ya están al tanto de la visión del Ejecutivo, que impactará de plano en los resultados económicos de los proyectos en el área de exploración y producción.
“Con los costos que tenemos hoy es imposible que algunos desarrollos de petróleo en yacimientos locales cierren con un crudo por debajo de los 60 dólares”, advirtió el vicepresidente de Operaciones de una petrolera. “Está claro que durante la última parte de este año e inicios de 2017 se acentuará una baja de la actividad, probablemente en el orden del 20 por ciento”, añadió.
Los productores interpretan que con el petróleo local cerca de los 50 dólares muchos de los proyectos de extracción de crudo en Santa Cruz y Chubut se tornarán inviables.
“La tasa interna de retorno para esas inversiones ya es baja por el incremento de los costos operativos. Si el precio interno cae, la TIR perforará la barrera del 10%, es decir, apenas permitirá cubrir el costo de financiamiento”, analizó un economista especializado en el negocio hidrocarburífero. “En la cuenca Neuquina, en tanto, será difícil encarar nuevos proyectos marginales. Por todo eso, lo más probable es que la producción de crudo comience a caer”, alertó.
