En una jornada decisiva para el ámbito judicial de la provincia, el plenario de trabajadores judiciales nucleados en el Sejun alcanzó un acuerdo al aceptar la propuesta salarial presentada por el Superior Tribunal de Justicia (TSJ). Con 105 votos a favor y 60 en contra, se cerró así un ciclo de tensiones y negociaciones que mantenía en vilo al sector.

La propuesta aceptada implica un aumento salarial por Índice de Precios al Consumidor (IPC) para el periodo entre febrero de 2024 y enero de 2025. Este incremento se realizará en cuatro etapas, con actualizaciones en los meses de abril, julio, octubre y enero de 2025. Es importante destacar que el ajuste de abril no considerará la inflación de enero, mientras que los restantes aumentos serán equivalentes a la suma inflacionaria del trimestre anterior a cada reajuste.

Además de esta fórmula de actualización automática por inflación, los trabajadores judiciales recibirán tres asignaciones extraordinarias no remunerativas ni bonificables, cada una por un monto de $150.000. Estas asignaciones serán abonadas junto con los sueldos correspondientes a los meses de marzo, abril y septiembre de 2024, y en este último caso se incluirá una diferencia equivalente a la inflación acumulada entre mayo y agosto.

Uno de los aspectos más destacados de este acuerdo es la garantía de que no se realizarán descuentos por los días de paro que hayan llevado a cabo los trabajadores. Esta medida, que era una de las principales demandas del gremio, será expresamente abolida en el acto de acuerdo que firmarán el Sejun y el TSJ, cerrando así la cuestión salarial hasta el próximo año.

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