Un pueblo cercano a Comodoro tuvo un frío extremo récord y se quedó sin agua porque el río se congeló
Una comunidad rural lucha contra el hielo que afecta las viviendas, los servicios básicos y la salud de la población vulnerable, en medio de la ola polar que afecta a Chubut.
La Patagonia, y en particular la provincia de Chubut, atraviesa una ola polar de características extremas que está afectando gravemente a gran parte de su territorio, con temperaturas que alcanzan niveles peligrosos para la salud de toda la población.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió diversas alertas climáticas para la provincia, clasificadas en rojo, naranja y amarillo, según la intensidad del frío y el impacto previsto en la salud pública:
Las localidades bajo alerta roja, la más grave, incluyen áreas como Costa de Florentino Ameghino, Costa de Rawson, Gaiman, Meseta de Biedma, Meseta de Rawson, entre otras. En estas regiones, las temperaturas bajo cero son extremas y representan un riesgo elevado, especialmente para niños, personas mayores y quienes padecen enfermedades crónicas. La recomendación es extremar los cuidados y evitar la exposición prolongada al frío.
En las zonas de alerta naranja, que abarcan sectores cordilleranos como Cushamen, Futaleufú y Languiñeo, se espera que el frío intenso también provoque efectos significativos en la salud, aunque en menor grado que en las áreas rojas. Finalmente, las áreas bajo alerta amarilla enfrentan un riesgo moderado, con temperaturas bajas que requieren precauciones, pero sin un impacto tan severo.
FACUNDO, EL PUEBLO DE CHUBUT QUE SE QUEDÓ SIN AGUA PORQUE SE CONGELÓ EL RÍO SENGUER
La localidad de Facundo, situada en el sudoeste de Chubut y a 260 kilómetros de Comodoro Rivadavia, está siendo una de las más afectadas. Allí, el río Senguer se congeló completamente, un fenómeno poco común que refleja la magnitud de esta ola polar.
Las temperaturas llegaron a -18ºC reales, con sensaciones térmicas que superan los -20ºC bajo cero, detalló Diario Jornada.
La falta de suministro de gas obligó al cierre temporal del municipio y complicó la vida cotidiana de los vecinos, quienes deben dejar correr el agua en sus hogares para evitar que las cañerías internas se congelen y se rompan.
Este frío extremo también congeló cascadas de gran altura en la cordillera chubutense, un espectáculo natural que llama la atención pero que también evidencia la severidad del clima actual. Las condiciones que permiten este fenómeno incluyen humedad elevada, temperaturas sostenidas bajo cero y caudales bajos, que facilitan la formación de hielo sobre las masas de agua.
Las autoridades provinciales tomaron medidas preventivas, como la suspensión de clases en varias localidades, para proteger a la población vulnerable. Además, se insiste en la importancia de mantenerse abrigados, evitar actividades al aire libre durante las horas más frías y estar atentos a las recomendaciones oficiales.
La ola polar que afecta a Chubut y la Patagonia en general es una emergencia climática que pone en jaque la salud y la infraestructura básica de muchas comunidades, y que exige una respuesta coordinada para minimizar sus impactos y garantizar la seguridad de los habitantes.
