La gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, denunció un “gravísimo” hecho cuando un grupo de encapuchados, pertenecientes presuntamente a una agrupación mapuche, incendió el domingo por la noche un puesto que Gendarmería Nacional había instalado en Villa Mascardi para custodiar un predio que había sido vandalizado en agosto pasado. Los efectivos que se encontraban en el lugar debieron retirarse para evitar ser heridos.

Tras el ataque, el Gobierno Nacional anunció la decisión de crear  un comando especial de cuatro fuerzas federales en el lugar, para prevenir nuevos ataques y atento a que el predio había quedado sin ningún tipo de custodia. 

La cabaña vandalizada hace meses atrás fue usurpada. Foto: archivo
La cabaña vandalizada hace meses atrás fue usurpada. Foto: archivo

Los efectivos de Gendarmería se habían establecido allí a pedido de los propietarios de la cabaña Los Radales, incendiada el 31 de julio. La misma está ubicada a 300 metros de la toma que mantiene la comunidad mapuche Lafken Winkul Mapu en terrenos de Gas del Estado.

Pero antes de que se pudiera instalar un nuevo puesto para custodiar la zona, y mientras un equipo criminalístico de la Policía Federal trabajaba el miércoles en el lugar para recopilar evidencias para la causa, un grupo de mapuches aún no identificado tomó el predio de Los Radales y se atrincheró dentro de la casa -completamente destruida- de Luis Dates, dueño de la propiedad privada. 

Los gendarmes que estaban custodiando las instalaciones debieron replegarse tras ser hostigados por los encapuchados, que arrojaron piedras y otros elementos contundentes contra ellos, según informó TN.

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