Este viernes aparecieron lampreas en la zona de Boca Toma, en el valle de Chubut, sorprendiendo a los vecinos. Se trata de peces que se alimentan de la sangre de sus presas.
Son agnatos (sin mandíbula) y tienen una boca circular en forma de ventosa para fijarse a las presas de las que se alimentan. Además, cuentan con varios círculos concéntricos de dientes córneos, además de una lengua también córnea usada para raspar los tejidos.
Tal como detalla El Chubut, esta condición les permite raspar la carne y sorber la sangre de tiburones, salmones, bacalaos y mamíferos marinos.
Las lampreas nacen en el río, en donde permanecen unos 4 o 5 años en estado larvario, hasta llegar a medir 20 centímetros de largo.
Tienen una lengua que funciona como un émbolo: después de hacer el vacío sobre el abdomen de una presa dentro de su boca, succiona la sangre al retroceder. Es entonces cuando los ejemplares se convierten en adultos y descienden al mar, donde vivirán a unos 200 a 500 metros de profundidad, hasta llegar a la madurez sexual.