Se conoció quién cuidará a Milo, el bebé que sobrevivió a la tragedia familiar en Villa Devoto
El reencuentro familiar se transformó en una pesadilla y dejó como saldo cinco muertos por intoxicación de monóxido de carbono.
La tragedia que sacudió a Villa Devoto comenzó como un reencuentro familiar lleno de esperanza y terminó en un desgarrador suceso que conmueve a todo el país.
El pasado lunes 30 de junio, Milo De Nastchokine, un bebé de apenas un año y medio, llegó al aeropuerto de Ezeiza junto a sus padres, Andrés De Nastchokine (43) y Marie Lanane (42), ambos de nacionalidad francesa, y su hermana mayor Elisa (4). La familia, que vivía en Italia, había viajado a Argentina para que los abuelos paternos, Demetrio De Nastchokine (79) y Graciela Just (74), pudieran conocer a sus nietos por primera vez tras años de distancia.
El reencuentro en el aeropuerto fue emotivo y quedó inmortalizado en imágenes que recorrieron las redes sociales: abrazos, sonrisas y regalos, como una caja personalizada para Milo decorada con banderas argentinas, simbolizaban la alegría de la familia reunida. Alejandro y Maia, hermanos de Andrés, también estaban presentes para recibirlos con lágrimas en los ojos y corazones llenos de emoción.
Sin embargo, lo que debía ser una noche de alegría en la casa familiar de Sanabria 3768, en el barrio porteño de Villa Devoto, se convirtió en una tragedia. Horas después, cinco miembros de la familia fueron encontrados sin vida por una intoxicación por monóxido de carbono, un gas invisible, inodoro y letal. La alerta la dio Maia, quien al ingresar a la vivienda se desmayó por la inhalación del gas, pero pudo comunicar la emergencia al 911.
Según el informe preliminar al que tuvo acceso TN, la causa del accidente fatal fue una falla en la caldera de la casa, combinada con la obstrucción de las rejillas de ventilación, que la familia había sellado con cinta adhesiva y film plástico, impidiendo la renovación del aire. En el artefacto se encontró un papel con dos presupuestos para su reparación, lo que indicaría que la familia tenía previsto arreglar la caldera, pero la falta de mantenimiento y las filtraciones por corrosión en el conducto de evacuación provocaron la acumulación letal de monóxido de carbono en los pisos superiores de la vivienda.
La tragedia se cobró la vida de Demetrio y Graciela, que estaban en una habitación en el segundo piso, y de Andrés, Marie y Elisa, que dormían en el primer piso. Milo, que dormía en un cuarto separado, fue el único sobreviviente. Fue encontrado llorando y con síntomas de intoxicación, por lo que fue trasladado primero al Hospital Zubizarreta y luego al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, donde permanece internado en la Unidad de Cuidados Intensivos Infantil, con asistencia respiratoria mediante cánula de alto flujo y en evolución favorable, según el último parte médico.
QUIÉN CUIDARÁ A MILO, EL BEBÉ QUE SOBREVIVIÓ EN LA TRAGEDIA DE VILLA DEVOTO
El periodista Carlos Salerno, en el programa Desayuno Americano (América TV), relató con emoción el rescate del pequeño y la nueva realidad que enfrenta la familia: “Bueno, es la nueva mamá de Milo y este niño ya no vuelve a Italia, se queda acá”, refiriéndose a Maia, quien ahora deberá asumir el rol de figura materna para el bebé, en medio de un dolor inmenso.
La conmoción también se hizo palpable en el estudio, donde Pamela David expresó su tristeza: “Uno se imagina a este bebé que se quedó sin nadie… sin sus padres, su hermana, sus abuelos”. Luis Bremer agregó una reflexión sobre el impacto emocional para Maia: “No quiero ni pensar cómo a esta mujer le cambió la vida con toda su familia muerta y un niño a cargo”.
La casa, hoy cerrada y silenciosa, tiene en su portón un rosario blanco dejado por un vecino, símbolo del dolor y la memoria colectiva.
