Los chicos intoxicados con cloro sufrieron gastritis y un cuadro respiratorio que requirió atención en terapia

Los chicos intoxicados durante el festejo de un cumpleaños en un salón con pileta de Comodoro tuvieron que ser atendidos en el Hospital Regional, luego de presentar distintos síntomas. Uno de ellos sufrió un cuadro más grave, con compromiso de la vía aérea, lo que obligó a tenerlo en observación durante algunas horas en terapia intermedia.

Otros seis nenes también estuvieron en observación en la guardia del hospital. “Se les hizo una hidratación endovenosa y anduvieron todos muy bien. Fue algo leve, por un contacto con concentración alta de cloro”, explicó Mauro Nieto, el jefe de Terapia Intensiva Infantil del Hospital Regional, en diálogo con ADNSUR.

El médico detalló los efectos que puede producir el contacto con concentraciones de cloro más altas de las recomendables. “El cloro irrita la mucosa. Por lo general, los chicos en la pileta tragan agua y en el tubo digestivo provoca gastroenteritis. Los chicos estos venían con vómitos, por lo que se les puso un suero para hidratarlos y se recuperaron bien”, agregó Nieto.

Varios de ellos quedaron en observación durante la noche, mientras que uno tuvo un cuadro más complejo. “Los vapores de cloro también se inhalan, irritando las vías aéreas, por lo que un chiquito que vino derivado del privado tenía una laringitis y lo tuvimos en observación unas horas en la terapia intensiva. A diferencia del resto, que presentaron problemas digestivos, este chico tuvo un compromiso ella vía aérea, aunque muy leve”, agregó el médico.

Por último, sostuvo que es probable que la pileta tuviera más cloro de lo indicado. “Para potabilizar el agua y que sea segura, se necesitan sólo dos gotitas de lavandina por cada litro de agua”, agregó.

EL RELATO DE UNA DE LAS MADRES

“Salieron con los ojos bien colorados, empezaron a vomitar uno tras otro”, relató una de las madres que participó del festejo a ADNSUR. Si bien al principio pensaron que era una irritación por estar mucho tiempo en el agua, cuando varios chicos comenzaron a descomponerse, los adultos pidieron ayuda a las encargadas del lugar.

Sin embargo, una mamá aclaró que les dijeron que “no era por la pileta, que había sido algo que comieron los nenes”. Pero el olor a cloro era muy fuerte; desde afuera ya picaba la nariz y lloraban los ojos. Incluso a los mayores les pasaba”, contó la mujer.

Además del mal momento vivido, las familias denunciaron la falta de respuesta de los responsables del salón. 

Aseguran que les prometieron atención médica a través de un seguro, pero al llegar al centro médico privado les informaron que debían pagar todo de forma particular, ya que el lugar no contaba con cobertura.

El secretario de Control Operativo municipal de Comodoro Rivadavia, Ricardo Gaitán, indicó que la pileta no contaba con habilitación y por esa razón fue clausurada.

Además, el funcionario señaló que ante el crecimiento de salones con piletas, enviaron al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para reglamentar ese tipo de locales. “Al no haber control de la calidad del agua y de pileteros, se incrementó mucho el riesgo de tener problemas”, afirmó Gaitán.