La polémica imagen que publicó Donald Trump a días del cónclave que elegirá al sucesor del papa Francisco

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, compartió una imagen creada mediante inteligencia artificial en la que aparece ataviado como el Papa, justo cuando faltan pocos días para que se lleve a cabo el cónclave que decidirá al sucesor de Francisco, previsto para el miércoles.

A comienzos de la semana, el empresario y líder republicano hizo comentarios en tono humorístico sobre el proceso para elegir al próximo jefe espiritual de los 1.400 millones de católicos en el mundo, una comunidad que representa una minoría religiosa dentro del territorio estadounidense.

La imagen, publicada en su plataforma Truth Social y en los canales oficiales de la Casa Blanca, lo muestra sentado con una expresión seria en un sillón, usando la tradicional vestimenta papal blanca, la mitra sobre la cabeza y una gran cruz dorada al pecho. Su mano izquierda descansa sobre el muslo, mientras que con la derecha señala al cielo con el dedo índice. La fotografía fue difundida sin ningún mensaje o explicación adicional por parte del mandatario.

“Me gustaría ser papa. Esa sería mi opción número uno. Creo que sería un gran papa. Nadie lo haría mejor que yo”, dijo el mandatario el miércoles desde la Casa Blanca cuando los periodistas le preguntaron por sus preferencias sobre el heredero de Francisco, que murió el lunes de Pascuas a los 88 años.

Controversia y choques de Donald Trump con el papa Francisco

Con esta imagen, Trump vuelve a generar controversia, ya que en el funeral del papa Francisco, el pasado sábado en El Vaticano, se salió del protocolo al asistir vestido de azul y no de negro, como lo dicta la tradición en estos casos.

Además, durante la homilía el mandatario se mostró inquieto, mascando chicle y sin aplaudir.

Fue mientras el cardenal Giovanni Battista Re recordaba la histórica misa de Francisco en la frontera entre México y EEUU, también mencionó una de las frases más recordadas del papa, cuando expresó que “los muros no eran la solución”. Su mensaje fue aplaudido por todos, menos por Donald Trump.

Trump solo permaneció medio día en la Ciudad Eterna. A diferencia de su predecesor demócrata Joe Biden, un católico devoto y muy amigo de Francisco, Trump siempre mantuvo una relación muy tensa con el con el primer pontífice latinoamericano por sus críticas a su política migratoria.

La víspera de su muerte, el papa Francisco recibió brevemente al vicepresidente estadounidense, JD Vance, católico converso y muy conservador, dos meses después de las duras críticas que el pontífice hizo sobre la política de deportaciones de migrantes del gobierno Trump. En una carta, Francisco advirtió de una “crisis grave” que “empieza mal y acabará mal”.