RAWSON (ADNSUR) – Matías Torres, oriundo de Rawson, es diseñador industrial y junto a un colega desarrollaron una silla de ruedas compacta de bipedestación manual y ahora compiten en un certamen nacional de innovación.

Matías Torres nació en la capital provincial pero hace años está afincado en Córdoba, donde estudio diseño industrial y tras recibirse, desarrolla allí su profesión y además impulsa una idea que viene de su época de facultad y que ahora ha sido elegida por la empresa Samsung para competir dentro de un certamen que nuclea a una veintena de innovadores de todo el país, informó diario Jornada.

“Este proyecto de la silla de ruedas es parte de la carrera, la tesis de la carrera fue justamente esta silla de ruedas” contó Matías a Jornada desde Córdoba y explicó que JUNCO –así se llama- se trata de un proyecto realizado en conjunto con Rodrigo Nuñes Mola, un colega oriundo de Formosa con quien cursó diseño industrial y fue su compañero de tesis.

La silla de ruedas se trata de un elemento “compacto, de tamaño y peso reducido, con  buena maniobrabilidad y destinada al uso cotidiano”. Torres explicó que se trata de “una silla de ruedas pensada para usuarios activos, que tienen vida social, que salen, que andan por la ciudad, y el hecho de que sea de bipedestación manual significa que esto le permite a la persona ponerse de pie activando un mecanismo con su propia fuerza, de manera autónoma, sin ayuda de terceros”.

BENEFICIOS EN LA SALUD

Matías Torres y Rodrigo  Núñez Mola ya han diseñado, en papel, la que a futuro puede ser la silla de ruedas compacta más liviana del país, pero a diferencia de esa idea, el modelo con bipedestación manual ha superado esa etapa y se ha logrado concretar un prototipo.

“Este desarrollo tiene una visión compleja, ya que el hecho de que una persona pueda ponerse de pie lejos de ser algo burdo es muy importante, es parte del tratamiento de cualquier persona con paraplejia” explicó Matías Torres y asegura que genera muchos beneficios “para la salud de las personas con este problema, ya que mejora la capacidad digestiva, la capacidad pulmonar, la circulación, reduce la osteoporosis y también las ulceras por presión que son lastimaduras que se producen por estar mucho tiempo sentadas. También reduce la espasticidad que son movimientos involuntarios de los músculos de personas con paraplejia, es decir que mejora la calidad de vida en cuanto a la salud física”.

En ese sentido indicó que el hecho de que la silla permita a la persona pararse, “mejora la autoestima. Una persona al controlar los valores primarios de autonomía, se vuelve más independiente y ve mejorada su autoestima, ya que potencia la capacidad funcional de la persona”.

El diseñador industrial contó que el mecanismo que tiene la silla permite a una persona parapléjica pararse “y acceder a lugares que antes no podía acceder” y sostuvo que en la mayoría de los casos quienes padecen este tipo de problema de salud “no vive en casa preparada para ellos; viven en la casa en la que pueden vivir, en la que vivimos todos y desde una silla de ruedas a veces no se puede acceder a una hornalla para cocinar, o agarrar un tarro que está arriba de la heladera o la alacena, o algo tan simple como mirarse en el espejo del botiquín”.

“Es un elemento que también da autonomía y accesibilidad en el exterior y sin un elemento como este es más difícil acceder al mercado laboral, lo que es un gran problema porque la vida de una persona en silla de ruedas es más cara, desde contar con un transporte especial o manejarse en taxi hasta realizar una rehabilitación, todo es más caro. Esta silla potencia la capacidad funcional de la persona, y ayuda un poco a acceder al mercado laboral” dijo el joven capitalino.

FALTA TIEMPO Y FINANCIAMIENTO

En cuanto al proyecto hoy, aseguró que junto a quien fue su compañero de estudios y hoy colega “desarrollamos el producto hasta cierto punto, lo hicimos en el ámbito académico donde teníamos todo el tiempo, pero cuando terminamos de estudiar nos encontramos con la vida, nos encontramos con que uno tiene que conseguir un trabajo y dedicarse a hacer su carrera”.

“Al proyecto para que sea rentable, le falta pulir el diseño, aceitar una cadena de proveedores, las habilitaciones necesarias para poder comercializar. Todo eso es tiempo y dinero, además de cierta capacitación que también necesitamos en aspectos legales o técnicos de la ingeniera, que uno de repente conoce muy por encima. Ahí tenes todas las dificultades que se presentan” dijo Matías Torres.

UN CONCURSO QUE ABRE PUERTAS

La empresa Samsung lanzó hace algunas semanas en Argentina el certamen “Samsung Innova”, una iniciativa que premia a los mejores emprendimientos del país vinculados con la tecnología, la innovación y el mejoramiento de la sociedad.

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