Déficit energético: habrá más apagones este invierno
Será si no se toman decisiones de fondo.
COMODORO RIVADAVIA (Por Raúl Figueroa / Especial para ADNSUR) - Los dos apagones sufridos por el sur de Chubut y norte de Santa Cruz en un lapso de 10 días dejaron en evidencia la precariedad del abastecimiento eléctrico que sufren Comodoro Rivadavia y su zona de influencia, a raíz de un déficit estimado en 100 megawatts de generación. La necesidad de un seccionamiento en la línea de 500 Kv para poder reorientar la oferta eólica que está sumando la región y el frustrado proyecto Ingentis, con una turbina de 100 Mw que quedó alejada en un depósito de Estados Unidos, aparecen como expresiones de deseos ante una situación que el propio gobernador calificó hace un año como “la grave crisis terminal en materia de servicio eléctrico de generación y transporte que viene soportando la ciudad más importante de nuestra provincia”, en una nota dirigida al presidente Mauricio Macri.
Las explicaciones sobre el apagón no han abundado, más allá de las hipótesis en torno a la combinación entre nieve y hielo y la salida de servicio de la línea de 500 Kilovolts, que a partir de la caída activa sistemas de protección sacando a todos los aportes de generación que se ubican desde Madryn al sur, es decir el Dique Ameghino, Energía del Sur y la generación de Pico Truncado.
Fuentes consultadas por ADNSur y vinculadas al ámbito técnico descartaron que los problemas se originen en una falta de mantenimiento de la línea de 500 de kv por parte de la firma Transener, ya que se trata de una línea “prácticamente nueva”, inaugurada en el año 2007, al tiempo que indicaron que no hay posibilidades de prevenir los efectos de las bajas temperaturas y las inclemencias climáticas que pueden caracterizar a la Patagonia.
Desde esa perspectiva, cabe esperar entonces que ante un invierno crudo como el que se está desarrollando, los apagones del sábado 18 y el miércoles 28 de junio no hayan sido los últimos de la temporada.
La turbina de Ingentis
No es un problema nuevo. La precariedad del sistema energético de la región es reconocida en forma oficial desde hace tiempo, tal como quedó plasmada en la carta dirigida por el gobernador Mario Das Neves al presidente Mauricio Macri, en abril del año pasado. En esa nota se solicitaba ayuda para construir de manera prioritaria una línea de 132 Kv entre Pico Truncado y Comodoro, solicitándose además la garantía de suministro de gas por parte del Ministerio de Energía y Minas para instalar en Comodoro la turbina de la empresa estatal Ingentis, un equipo por el que la provincia pagó más de 40 millones de dólares y hace siete años está guardado en depósitos de la empresa General Electric, en Estados Unidos. Incluso uno de los transformadores y contenedores de aceites de enfriamiento descansan desde hace casi una década en los depósitos fiscales de la zona franca del puerto de Comodoro Rivadavia. Vale recordar que el proyecto Ingentis había sido iniciado con el grupo Pampa Energía, empresa que al retirarse de la sociedad con la provincia de Chubut se llevó una de las dos turbinas que habían adquirido; la misma se encuentra instalada en la provincia de Neuquén y en pleno funcionamiento, abasteciendo al área de Loma La Lata.
La posibilidad de traer la turbina, capaz de generar 100 Mw, está en estudio desde hace tiempo. El trámite no es sencillo, porque la provincia debería pagar la deuda acumulada por el uso del depósito en Estados Unidos, además de que deberían hacerse adecuaciones técnicas sobre una turbina que hace 10 años era de última tecnología, pero que hoy requiere un “reseteo” para adaptarse a los cambios del mercado.
La evaluación entre costo y beneficio de traer ese equipo, que posibilitaría cubrir el déficit de 100 Mw que hoy tiene la región (algo que posibilitaría, ante una caída de la línea de 500 Kv, restablecer rápidamente el servicio eléctrico, en un margen inferior a una hora según evalúan técnicos vinculados a Transpa) se estaría realizando en conjunto con YPF. En efecto, esta empresa está montando un parque de 100 Mw de potencia eólica, lo que posibilitará cubrir sus requerimientos energéticos en yacimientos, pero además podría vender energía al sistema nacional en caso de tener excedentes. Para ingresar con potencia eólica, la normativa actual exige contar con potencia firme de respaldo (como tal se considera a la generación a gas y otras fuentes tradicionales, ya que la eólica es aleatoria debido a que si no hay viento, no puede generar y tampoco acumula energía); de allí que en el análisis se habría involucrado a la petrolera, en una compleja ecuación que por ahora no permite vislumbrar resultados concretos.
El seccionamiento de la línea de 500 Kv
En cualquier caso, para sumar alternativas se necesita insoslayablemente la apertura o seccionamiento en la línea de 500 kv. Así lo expresó Das Neves en su nota a Macri el año pasado: “Cuando se constituyó la Línea de 500 kv Puerto Madryn-Pico Truncado, sin lugar a dudas la ciudad a la que le correspondía ejecutar la Subestación de 500/132 kv era Comodoro Rivadavia, pero el gobierno anterior privilegió a Pico Truncado. Esta decisión dejó a la ciudad más importante de la Patagonia al margen de la seguridad de contar con el servicio eléctrico interconectado”, agregó.
Cualquiera sea la alternativa que pueda encontrarse para sumar generación, hoy se requiere de esa apertura para poder ingresar y “bajar” energía desde la línea de 500 kv hacia la ciudad petrolera, de allí que la construcción de una línea 132 kv desde Pico Truncado (con una subestación de rebaje de 500 a 132 kv) a Comodoro posibilitaría dicha apertura para despachar energía adicional en caso de cortes de la línea que proviene desde Puerto Madryn.
Transcurrido más de un año desde aquel reclamo, la precariedad energética sigue mostrando que se requieren decisiones urgentes. Por las dudas, habrá que tener linternas y paquetes de velas a mano.
