Cuidados del auto en invierno: batería, refrigerante y arranque en frío
El invierno puede complicar el arranque del auto y dañar componentes clave si no se toman precauciones. ¿Qué recomienda un mecánico local?
Con la llegada del invierno y las bajas temperaturas, es fundamental tener en cuenta algunos cuidados para proteger el correcto funcionamiento del auto. El mecánico comodorense Eduardo Bello explicó en detalle cuáles son los principales puntos a revisar cuando bajan los termómetros.
“El frío afecta sobre todo la batería del vehículo, que es la que más sufre. Se exige más en las mañanas y durante el día también pierde potencia. Si está en condiciones medias, puede dejar de arrancar en cualquier momento”, explicó.
La recomendación en estos casos es acudir a un local especializado para medir la potencia de arranque, un chequeo que puede evitar quedar varado en plena calle. Como medida casera, recordó que “los antiguos pobladores tiraban un balde de agua caliente sobre el motor y la batería para templarlos un poco y así lograr que arranquen”.
Otra de las consecuencias del frío es el congelamiento de los líquidos, especialmente el refrigerante. Bello detalló que hay que controlar el nivel y también el pH, que indica cuántos grados bajo cero puede soportar el líquido sin congelarse. “Hoy los refrigerantes no solo evitan el congelamiento, sino que ayudan a mantener la temperatura del motor y mejoran su rendimiento”, explicó.
En vehículos con motores diésel, hay que prestar atención a las bujías de precalentamiento. En verano, algunos vehículos funcionan incluso con una o dos bujías en mal estado, pero en invierno, si no están todas operativas, directamente no arrancan.
Respecto a los líquidos refrigerantes, su mantenimiento depende del modelo del auto y del kilometraje. En vehículos nuevos, se revisa o reemplaza según las indicaciones del fabricante, mientras que en autos más antiguos, se recomienda controlar regularmente el nivel del depósito y su capacidad anticongelante. “Aunque en nuestra zona no tenemos temperaturas bajo cero extremas, es algo que ayuda al motor y alarga su vida útil”, afirmó el especialista.
Para no tener sorpresas en invierno, es clave revisar la batería, controlar el estado del refrigerante, verificar las bujías en autos diésel y hacer los chequeos periódicos recomendados por los fabricantes. Un mantenimiento básico puede evitar fallas costosas y garantizar que tu vehículo responda sin problemas, incluso en las mañanas más frías del año.
