Científicos patagónicos se suman a una misión para explorar ecosistemas marinos argentinos a casi 4000 metros
Investigadores del CONICET participarán en una expedición internacional en aguas del Atlántico Sur, con tecnología de punta y un enfoque interdisciplinario para estudiar zonas poco conocidas del océano.
A pesar de que los océanos ocupan más del 70 % de la superficie terrestre, gran parte de sus fondos más profundos aún permanecen inexplorados. En esas regiones extremas, donde la presión es intensa y la luz no penetra, se desarrollan ecosistemas únicos que cumplen funciones clave en la regulación del clima, la biodiversidad y los ciclos biogeoquímicos. Comprender esos entornos remotos es uno de los grandes desafíos científicos del siglo XXI.
En este contexto, un equipo de científicos del Centro Nacional Patagónico (CENPAT-CONICET) será parte de una expedición internacional que recorrerá uno de los sectores menos estudiados del mar argentino. La campaña se llevará a cabo en julio a bordo del buque de investigación Falkor (too), operado por el prestigioso Schmidt Ocean Institute, y buscará obtener información inédita sobre la biodiversidad de las profundidades del Cañón Submarino Mar del Plata.
Los investigadores Martín Brogger, Gregorio Bigatti, Javier Signorelli y Jonathan Flores, del Instituto de Biología de Organismos Marinos (IBIOMAR-CONICET), aportarán su experiencia acumulada durante más de una década de trabajo en el talud continental argentino. La zona de estudio, ubicada frente a la provincia de Buenos Aires, es considerada una frontera biogeográfica clave donde confluyen las corrientes de Brasil y Malvinas.
Durante la campaña que será la primera del Schmidt Ocean Institute en esta parte del Atlántico Sur se explorarán hábitats vulnerables a profundidades de hasta 3.900 metros, incluyendo sectores de la Plataforma Continental Extendida de Argentina, reconocida por Naciones Unidas en 2016. Entre los objetivos figuran el estudio de la biodiversidad bentónica, procesos reproductivos, dinámica de sedimentos, ADN ambiental, carbono azul, y también el impacto humano en estos ambientes, como basura marina y microplásticos.
En tanto, uno de los hitos tecnológicos será el uso del ROV SuBastian, un vehículo submarino operado a distancia, capaz de capturar imágenes de alta resolución, recolectar muestras con mínima intervención y modelar organismos en 3D. Esta herramienta permitirá observar la vida en tiempo real a profundidades extremas, facilitando tanto la investigación como la divulgación educativa.
“Es un privilegio para nuestro equipo ser parte de esta colaboración internacional. Esta campaña representa un salto científico y tecnológico en el conocimiento de los fondos oceánicos profundos”, afirmó Martín Brogger, quien recordó que entre 2013 y 2014 ya habían realizado campañas similares con el buque argentino “Puerto Deseado”.
La iniciativa está liderada por el Museo Argentino de Ciencias Naturales (MACN–CONICET) y cuenta con la participación de instituciones científicas de Ushuaia, Buenos Aires, La Plata, Córdoba y Mar del Plata. Además, se promoverá la comunicación pública de la ciencia. Habrá transmisiones en vivo desde el buque, encuentros con escuelas y museos, y publicación de datos en repositorios abiertos como CONICET Digital, OBIS y GenBank.
Gacetilla de información del CONICET-CENPAT, con edición de un periodista de ADNSUR
