Antes de su muerte, Sebastián Acosta de Abelardos confesó un sueño pendiente: “Tengo ganas de…”
El reconocido guitarrista de la histórica banda comodorense, falleció este jueves tras estar internado por un problema de salud. En las semanas previas al show de despedida del grupo, había hablado en SETA TV, donde reveló uno de sus anhelos.
Este jueves 17 de abril, se conoció la triste noticia de la muerte de Sebastián Acosta, guitarrista y líder de la histórica banda comodorense Abelardos. Así lo confirmó su familia, a través de un sentido mensaje a través de redes sociales.
El artista estaba internado en el hospital por un problema de salud y habían solicitado cadenas de oración en su nombre. El pasado 28 de marzo, había visitado los estudios de SETA TV para charlar sobre los inicios de la banda, el show de despedida y su último sueño en la música.
En ese marco, el reconocido artista expresó su felicidad por el show que darían el 19 de abril en el Socio Fundadores, el cual contaría con la participación de los integrantes originales del grupo. En esa ocasión, expresó que le estaban poniendo todo el trabajo para que la última, sea una fecha linda.
También, había recordado los momentos claves del grupo. “Yo creo que los 2 primeros demos fueron los momentos claves y la salida de “El Color del Carnaval” también, pero hubieron muchos, la estocada en el barrio fueron increíbles, pero es momento de dar un pasito".
Por otra parte, indicó que estaban próximos a recibir el “Premio Cerro Chenque”, una mención especial por los 25 años de trayectoria de la banda. “Estos últimos años se han dado cosas muy lindas, pero tenemos que dejar descansar al pobre viejo este”, había contado Sebastián Acosta.
En aquel momento reveló uno de sus sueños personales. "Yo tengo ganas de hacer un disco mío. Entonces, dejar descansar esto para enfocarnos en otra cosa, mas que nada”.
LA DESPEDIDA DE SU FAMILIA
“Intenté tener fe... la vida es muy injusta. No merecías estar sufriendo así. Buen show allá arriba Bro, seguro estás buscando lugar para tocar”, señaló Rulo Acosta, su familiar en una emotiva publicación.
“Ya no hay dolor rockero, te juntaste con papá y mamá. Solo decirte que te voy a extrañar muchísimo. Teníamos muchos planes juntos, ahora en nada, pero como dije, la vida es muy injusta. Viviste a tu manera o como te salió, y está bien. Sabes que quedó una última caravana pendiente y vos sí te merecías ese último show, colgar la viola y subirte al avión, pero la vida es injusta... Mil gracias a todos los que estuvieron y siguen estando en este mal momento”, concluyó.
LA HISTORIA DE ABELARDOS
La banda comodorense Abelardos, ícono del rock sureño con influencias de Pappo’s Blues y Pescado Rabioso, atraviesa un momento crucial. Tras anunciar su retiro de los escenarios para abril de 2025, debieron suspender su último recital debido a la grave salud de su líder, Sebastián Acosta, quien finalmente falleció.
La banda Abelardos, nacida en 1999 en un pequeño departamento del barrio 30 de Octubre de Comodoro Rivadavia, más conocido como “1008”, surgió de la mano del “Loco” Fernando Henríquez, quien armó una sala de ensayo improvisada junto a Seba Acosta, Danilo “Poky” Ruiz, Diego Reyes y el “gordito” Henríquez.
Influenciados por Pappo’s Blues, Pescado Rabioso y Aquelarre, comenzaron versionando clásicos del rock argentino. Los primeros años estuvieron marcados por cambios de formación: Gustavo Ferreyra fue su vocalista inicial, seguido por Roberto Soto, autor de canciones emblemáticas como La hormiga e Ira en tu cerebro.
Con la llegada de Darío Acosta (voz), Bebe Márquez (saxo) y Hugo “Mono” Rodríguez (armónicas) a principios de los 2000, el sonido de la banda mutó hacia una fusión de rock visceral con matices blueseros. Su primer demo (2003), grabado con seis temas, los llevó a tocar en pubs como el Sótano y espacios emblemáticos como el playón del 1008, compartiendo escenario con El Pescado y sus Bacalaos. Septiembre de 2003 marcó un hito: telonearon a Intoxicados y, meses después, a 2 Minutos en Pico Truncado.
El segundo demo, Un mes más (2005), grabado con 10 temas, reflejó su evolución lírica hacia letras sociales que retrataban la vida en el sur. Los cambios continuaron en 2006 con la salida de Bebe Márquez y Darío Acosta, dando paso a Naty Cano (saxo) y, posteriormente, a Pablo Tapia (guitarra) en 2007. La formación se estabilizó con David Luna (armónicas) y Cristian “Rulo” Castillo (saxo), consolidándose como referentes locales.
De Caminando Lento al legado de un rock con acento sureño
El 2009 fue un año bisagra: grabaron el EP En Busca/Viejo Hormigón y participaron del primer Comodoro Rock, compartiendo cartel con Las Pastillas del Abuelo y La 25. “Fue una sorpresa ver a tanta gente bajo el viento patagónico”, recuerdan sobre aquel recital. En 2010 repitieron la hazaña en el segundo Comodoro Rock, abriendo el último día para Los Pericos, Ratones Paranoicos y Viejas Locas.
El 30 de octubre de 2010 cerraron su ciclo inicial con un histórico recital en el playón del 1008, ante más de mil personas. Tras meses de grabación, en mayo de 2011 lanzaron Caminando Lento, su primer álbum completo. Producido por Gerardo Alcoba, el disco incluyó 12 canciones que mezclaron denuncia social y poesía cotidiana, con ilustraciones de Juan Ramírez que capturaron la esencia comodorense. Temas como Viejo Hormigón y Nubes y las risas se convirtieron en himnos locales.
Aunque anunciaron su retiro para 2025, su historia sigue viva en recitales míticos, demos que circularon de mano en mano, y letras que hablan de “viento, frío y ruido industrial” —una crónica rockera de la Patagonia rebelde que los vio nacer.
