Aerolíneas Argentinas no solicitará fondos del Estado por primera vez desde su estatización
La empresa estatal logró su primer superávit operativo tras una serie de políticas de ajuste interno durante 16 años.
Por primera vez, luego de 16 años, Aerolíneas Argentinas comunicó que no necesitará fondos del Estado nacional durante todo 2025, según notificó al Ministerio de Economía. El dato marca un hito histórico, ya que la empresa acumuló u$s 8.000 millones en transferencias estatales para cubrir su déficit operativo en todo este tiempo.
Anteriormente, la aerolínea estatal registraba pérdidas operativas de u$s400 millones anuales medidas a través del indicador EBIT (ganancias antes de intereses e impuestos), el principal parámetro que utiliza la industria aerocomercial para medir eficiencia.
“El Tesoro nacional no se encuentra en condiciones de mantener una empresa altamente deficitaria a través del aporte de cientos de millones de pesos que provienen del esfuerzo de los habitantes de la República Argentina”, indicaron desde el gobierno en octubre de 2024, al declarar a Aerolíneas Argentinas como una empresa del Estado “sujeta a privatización”
Sin embargo, la situación comenzó a revertirse en 2024, cuando la compañía —bajo la conducción de Fabián Lombardo— alcanzó un superávit operativo de u$s20,2 millones y un resultado económico positivo de $156.324 millones (equivalente a más de u$s150 millones).
Estas cifras están siendo auditadas por la consultora internacional KPMG y serán oficializadas en los próximos meses, indicaron desde el Estado.
¿CUAL FUE LA ESTRATEGIA?
La situación financiera de Aerolíneas Argentinas ha dado un giro importante en los últimos tiempos, y esto se debe, en gran parte, a una estrategia de reducción de costos. Esta política ha implicado una significativa reducción del 15% de su plantilla de personal, lo que se traduce en la salida de más de 1.600 empleados y la eliminación de 85 cargos de alta dirección. Como resultado de estas decisiones, la aerolínea presenta actualmente el promedio más bajo de empleados por avión en su historia.
También se cancelaron rutas deficitarias y se consolidó un esquema de conectividad más rentable, apoyado en acuerdos con Iberia y LATAM para ampliar la red internacional.
La compañía cerró 19 de sus 21 sucursales comerciales en el interior del país, entre ellas la de Comodoro Rivadavia, dejando operativas solo las de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza. El gobierno argumentó la decisión con el dato de que solo el 1% de las ventas se realizan de forma presencial.
Con estos resultados, según publica Ámbito, Aerolíneas Argentinas rompe una racha de más de una década de dependencia financiera del Estado y proyecta un modelo de gestión autosustentable, con foco en la eficiencia operativa.
