“Acá tenemos una situación explosiva, a lo largo y ancho del país –dijo Pais- y también especialmente aquí en la provincia de Buenos Aires, donde hay una imposibilidad de pago de las tarifas de luz, gas y agua, porque las tarifas han subido más de 3.300 por ciento, en estos dos años y medio. Es cierto que veníamos con una situación de congelamiento, pero también es cierto que sin un paraguas social adecuado se ha trasladado a los usuarios el costo de decisiones políticas del gobierno”.
La iniciativa fue votada por 37 senadores a favor y 30 en contra, con 5 ausencias. Por su parte, Alfredo Luenzo advirtió que el gas está dolarizado, por lo que cada modificación del dólar impacta sobre ese fluido, que a su vez compone más de la matriz del país para generar energía eléctrica: es decir que cada aumento, se traslada a su vez a la tarifa eléctrica.
El Senador Mario Pais reclamó la emergencia tarifaria para revertir la dolarización.
“No es un proyecto bueno, pero encamina algunas soluciones –planteó el legislador comodorense-. Pero discutir política tarifaria sin discutir política energética, es difícil arribar a una conclusión certera sobre cuáles son los verdaderos costos de gas y electricidad. Los que menos tienen son hoy los que más sufren en la Argentina”, añadió.
En ese marco, las operadoras gasíferas ya advierten que para octubre podrían requerir un aumento del gas en el orden del 50%.
“No sabemos cuánto cuesta producir gas en Argentina –cuestionó Pais- pero sí sabemos cuánto hay que pagar por haberse dolarizado y establecerse una paridad con el precio de importación. El titular del Enargas me reconoció que no pagamos el gas en función de los costos de producción, sino en función del costo de oportunidad”. Por ello, reclamó la emergencia tarifaria para revertir la dolarización.
“El primer derecho no es garantizar la rentabilidad de las empresas, sino garantizar que la gente pueda acceder a los servicios”, señaló.
Por su parte, Luenzo advirtió que la distorsión se da desde el presupuesto, ya que la proyección tarifaria se hizo en base a un dólar de 19 pesos. Entre abril de 2016 y abril de 2018, indicó, la factura media de energía eléctrica creció un 1024%, mientras que el costo de transporte y distribución la suba fue de 3.861%. En gas, el aumento de 208% la factura medida, reseñó.
“Hace un año atrás –añadiò Luenzo- el valor del millón de BTU tenía un costo de 9,97 dólares, mientras que hoy es de 17,62 dólares para el mismo usuario (residencial R3). ¿Cómo se compone? 5, es el precio político, mientras que el resto lo componen el transporte, las distribuidoras y los impuestos. Cuando dolarizamos las tarifas, yo me pregunto: si bien la razón para que la producción de gas está dolarizada porque las inversiones están atadas al dólar, pero por qué también el transporte y distribución también está atado al dólar. ¿Por qué sometemos al usuario, en la etapa final, a un precio dolarizado?”.
