COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR / EDITORIAL) -  El vicegobernador Mariano Arcioni tuvo que reiterar en varias oportunidades en las últimas horas su decisión de asumir la banca de diputado nacional que acaba de lograr en un claro triunfo en las legislativas del 22 de octubre último, imponiéndose sobre el candidato de Cambiemos y relegando a un tercer lugar –y dejando fuera de la Cámara- al postulante del FPV.

La consulta del periodismo no es caprichosa, considerando que la salud del gobernador Mario Das Neves le ha motivado pedidos de licencias por reposo o tratamientos médicos que limitaron su normal desempeño en el cargo.

Nadie podrá negar el compromiso que el gobernador Das Neves tiene con la provincia de Chubut, a punto tal que, como dijo su jefe de Gabinete –Jerónimo García- sin eufemismos y con valorable sinceridad, está cumpliendo cabalmente con aquello que muchas veces fue metáfora, pero aquí se lleva dolorosamente a los hechos.

“Yo escuché muchas veces en mi vida política frases como ‘vamos a dar nuestros mejores esfuerzos’ o ‘a dejar la vida’, pero después se borraron o pusieron excusas; Das Neves está cumpliendo la palabra y estamos viendo ese proceso, de dejar todo por la provincia”, dijo al explicar los motivos del triunfo electoral y el acompañamiento mayoritario a la propuesta impulsada por el indiscutido líder provincial.

Das Neves merece el respeto y la valoración de quien mira de frente y con dignidad al destino inevitable de cada hombre. Si hasta quienes cuestionaron su estilo avasallante y excesivamente vehemente en otros tiempos hoy se conmueven de verlo en tamaño esfuerzo. Nada hay para reprochar en esa lucha, cuya magnitud tampoco merece ser subvalorada desde la pena.

Pero lo que sería esperable evaluar es si los mecanismos institucionales y republicanos deben ser obviados en aras del respeto personal, de los afectos y el temor a la incorrección política.

Esto nos obliga a reflexionar si es conveniente hoy prescindir de la figura del vicegobernador, cuando ha habido señales evidentes en estos dos años de gestión de que la salud puede poner un límite infranqueable para los hombres: hablamos de límites en vida, nadie pretende aquí especular con otro tipo de hipótesis.

Mariano Arcioni, de la mano de Mario Das Neves, acaba de recibir el respaldo de más de 100.000 ciudadanos. La mayoría votó a la figura de Arcioni acompañado de un apoyo que corresponde en gran parte al mandatario provincial, líder indiscutido de Chubut Somos Todos.

Ahí reside precisamente lo que el verdadero interés institucional debería priorizar en el análisis: ¿quién está más legitimado, que el propio vicegobernador, según lo prevé la Constitución, que además acaba de ser ratificado en las urnas, de la mano del proyecto político construido por su propio mentor, para los casos en que los tratamientos o indicaciones de reposo limiten el normal desempeño del gobernador?

Si lo que hacemos por los demás es el mejor legado de cada persona, tal vez el gobernador de Chubut, de cuya pasión y entrega por el territorio chubutense nadie podrá dudar, deba aún dar esa ofrenda: la de un capitán de barco que devuelve racionalidad y decide en base al sentido común, en momentos en que tal vez el dolor y las adversidades nublen la vista de su entorno en medio de la tormenta.

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