Comenzó el operativo para retirar el globo científico de la NASA que cayó en Chubut
La agencia espacial estadounidense activó un operativo para recuperar el globo aerostático de investigación lanzado desde Nueva Zelanda, que descendió la semana pasada en una zona de la provincia. Personal de Protección Civil colaboró en el terreno con especialistas de la NASA.
Este lunes 19 de mayo por la mañana, comenzó el operativo para recuperar el globo aerostático científico de la NASA que cayó en Chubut. Cabe recordar que el hecho mantuvo en vilo a los chubutenses, y cayó el pasado martes 13 de mayo, a unas 25 millas náuticas al noroeste de la Estancia Los Álamos, entre Los Altares y Las Plumas..
En este marco, se supo que personal de Protección Civil encabezó las tareas en el terreno, guiando a un grupo de expertos de la agencia espacial estadounidense (provenientes desde Houston) que se hizo presente en el lugar para coordinar la recuperación del equipo.
Sin embargo, prevén que la tarea para poder retirarlo demande algunos días, teniendo en cuenta que podría pesar “unos 5.000 kilos” dieron a entender desde la NASA. “Tienen que ingresar con camiones y con hidrogrúas para levantarlo”, indicó Eduardo Pérez, subsecretario de Protección Civil, a la prensa.
“Es un globo experimental que había lanzado la NASA y lo dirigen a zonas poco pobladas para el aterrizaje. Esta vez lo dirigieron a la Patagonia y cayó en nuestra provincia”, agregó.
Con respecto al globo científico, formaba parte de la misión 751 NT y había sido lanzado desde Nueva Zelanda como parte del segundo vuelo de prueba de la Campaña de Globos de Superpresión 2025. La misión concluyó de manera anticipada, pero exitosa, luego de 9 días, 6 horas y 36 minutos de vuelo, con el aterrizaje controlado ocurrido a la 1:30 a. m. del martes 13 de mayo (hora del este de EE. UU.).
Si bien inicialmente se estimaba que el descenso se produciría al sur de Comodoro Rivadavia, finalmente ocurrió al noroeste de la Estancia Los Álamos. Se trató de un aterrizaje en una zona deshabitada, sin generar riesgos.
Desde el 8 de mayo, el equipo técnico de la NASA venía monitoreando una falla en uno de los sistemas redundantes de carga de energía a bordo del globo, que tiene dimensiones comparables a las de un estadio de fútbol. Aunque el desempeño general fue bueno y se cumplieron los requisitos mínimos de la misión, el problema energético en la góndola motivó la decisión de concluir el vuelo como medida de precaución.
Tras coordinar con autoridades argentinas e identificar un sitio seguro, el globo fue desinflado y descendió sin complicaciones. Ahora, el personal trabaja en la recuperación de la estructura y de la carga útil, que además del sistema principal del globo, incluye varios instrumentos científicos y demostraciones tecnológicas.
Con información de Diario Jornada, redactada y editada por un periodista de ADNSUR
