TRELEW (ADNSUR) -  Guillermo Andrada ató a dos menores de edad en Playa Unión para violarlas. Ya tenía antecedentes pero fue beneficiado con salidas laborales de Trelew a Puerto Madryn. En su primer viaje lo sorprendieron con marihuana para 351 porros. Volvieron a sentenciarlo.

En 2014 Andrada violó en Playa Unión a dos menores de 16 años que salían de una fiesta por el Día de la Primavera. Las obligó a entrar en una obra en construcción, las ató y las violó. En 2016 fue condenado a 8 años de cárcel y declarado reincidente: ya tenía prontuario por delitos menos graves.

Debía quedar libre en abril de 2022, pero en noviembre del 2018 el juez Gustavo Castro aprobó incorporarlo en el régimen de semilibertad con el sistema de control electrónico. Y en su primera salida le encontraron 8 bochas de marihuana. Por esa causa, la jueza federal de Comodoro Rivadavia, Nora Cabrera de Monella, lo condenó a 2 años y 6 meses de cárcel efectiva y lo declaró reincidente por segunda vez.

En el caso del abuso acordaron un juicio abreviado. Andrada reconoció que siguió a las dos chicas que salían de un salón de eventos sobre la doble trocha a Playa.  Les faltaba media cuadra cuando las abordó por atrás, las hizo avanzar hasta una obra sin puertas ni ventanas, en una esquina.
 

Allí las tiró boca abajo. A una la ató con el cordón de un zapato; a la otra la golpeó en la cabeza cuando intentó escapar y le anudó las manos con la cadena de una de las carteras, la boca con un alambre y le tapó el rostro con la media de su amiga. Abusó de ellas, las tapó con un nylon de la construcción, les robó los celulares y desapareció hasta que fue detenido y juzgado, informó Diario Jornada.

Dos años y tres meses después de su condena, el juez Castro permitió las salidas laborales. La jueza concluyó que Andrada había salido del Centro de Detención de Trelew pero no llegó a su trabajo porque se desvió del recorrido autorizado. Llevaba 8 envoltorios de látex como globos y en su interior, otro envoltorio de nylon con marihuana. Era suficiente para armar 351 porros.

Fue condenado por tenencia simple de estupefacientes a dos años y seis meses de prisión efectiva, una multa de $ 225 y las costas del juicio incluyendo el costo de la pericia química. La justicia deberá decidir si el violador sigue con su beneficio de salidas laborales.

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