CALETA OLIVIA (ADNSUR) – Vecinos de la localidad de Puerto Santa Cruz se movilizaron por un presunto caso de abuso sexual contra dos menores de 8 y 12 años de edad. El acusado pidió perdón por las redes sociales al decirle a las familias de los menores que “les pido perdón de todo corazón, si es que me queda, puesto que está totalmente destrozado” y anunció que se iría de la ciudad para “no volver jamás”. Por tal motivo, los vecinos decidieron movilizarse para reclamar la detención del sujeto. Finalmente, el hombre fue ingresado en el baúl de un patrullero por “protección” y quedó detenido en la comisaría.

Foto: La Opinión Austral

Entre jueves y viernes se radicó, en la Comisaría Primera de Puerto Santa Cruz, una denuncia de abuso sexual por parte de los familiares de dos menores de 12 y 8 años contra un sujeto de apellido Piris, informó La Opinión Austral.

A pesar de la denuncia, no había ninguna orden de detención, ni había sido demorado preventivamente. Sin embargo, la indignación social surgió cuando el propio acusado prácticamente reconoció (sin hablar de abuso) lo que había hecho y publicó un pedido de perdón en su Facebook. Hecho rápidamente se viralizó y provocó la indignación de los habitantes de Puerto Santa Cruz, quienes se autoconvocaron a marchar para pedir justicia para los pequeños abusados y la detención del acusado.

En su perfil, el hombre reconoce haber roto “la confianza que me dieron” dos familias a las que “les pido perdón de todo corazón, si es que me queda, puesto que está totalmente destrozado”.

El sujeto prestaría servicios en Gendarmería Nacional y no trascendieron los detalles de cómo se habría perpetrado el abuso. En el texto publicado en su perfil de Facebook, el hombre indicó: “ojalá todo se resuelva para bien. Yo me voy lejos de aquí para nunca más volver”.

Además pidió “perdón a mis hijos” señalando que “ellos no son culpables de nada. Pido disculpas y perdón a los dos chiquitos que tanto me brindaron su cariño. Y a la madre por el daño causado”.

Una hora después de haberse conocido públicamente el posteo de Piris, se concretó una marcha en la localidad de familiares y amigos de la víctima. La concentración fue frente a la comisaría donde reclamaron la detención del sujeto. Sin embargo, las autoridades policiales indicaron que no existía orden de detención alguna contra el hombre y, por lo tanto, era libre de irse de la ciudad si así lo decidía.

Ante el revuelo por parte de la gente tanto en las redes como en la calle, finalmente el juzgado tomó intervención y ordenó la detención “preventiva” de Piris.

EN EL BAÚL POR PROTECCIÓN

Finalmente, el acusado fue detenido por la Policía y llevado a la comisaría. Para evitar que la gente lo pudiera maltratar, se decidió ingresarlo escondido en el baúl del móvil policial que lo fue a buscar a su vivienda.

Ante dicha situación, los vecinos se mostraron indignados por lo que reaccionaron con gritos y abucheos reclamando que fuera puesto frente a ellos para escracharlo.

El hombre quedó a disposición del juzgado y se estima que este lunes será tomada la declaración indagatoria, aunque previamente las familias deberán ratificar en sede judicial la denuncia de abuso y aún resta hacerles las correspondientes cámaras Gesell a las víctimas, dos criaturas de 8 y 12 años.

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