La Policía detuvo hace unos días a un joven de 33 años que batió el récord de robos en Trelew, aunque no es precisamente un especialista en la materia: en menos de 24 horas robó cinco veces, en todas lo atraparon y terminó en la comisaría.

Como si fuera una “puerta giratoria”, la Justicia lo liberó en las últimas horas al entender que los delitos por los que se lo acusa son excarcelables y no debería permanecer encerrado.

Las juezas Stella Arizmendi y Yamila Flores hicieron lugar al pedido de medidas sustitutivas para que esta persona no esté tras las rejas mientras avanza el proceso judicial.

El joven que robó cinco veces y lo soltaron, deberá presentarse tres días por semana en una comisaría de Trelew y la Policía deberá verificar si está en su casa.

Lo insólito es que un juez de Trelew, Gustavo Castro, antes había resuelto que pasara 15 días en la cárcel después de esta maratónica seguidilla de robos frustrados al considerar que había peligro de fuga.

OTRA OPORTUNIDAD

En los cinco robos que cometió y lo capturaron, el viernes pasado, el joven salió de la comisaría "volver a intentarlo” puesto que vieron frustrados mereced a su poca capacidad de escabullirse. 

Si el delito fuera un arte o una profesión, bromearon algunos en la Justicia, este joven probablemente “nunca se hubiera graduado”.

En el último intento fallido, el joven ingresó al Colegio María Auxiliadora haciéndose pasar por el padre de un alumno, y se llevó un buzo del uniforme y las tarjetas de una docente.

Lo insólito del caso es que los mismos directivos del colegio lo persiguieron y le avisaron a unos policías. 

El joven reincidente primero cayó en la comisaría por romper el vidrio de una camioneta y llevarse pertenencias en una mochila. 

Después la Policía se lo llevó demorado cuando intentó robarle un celular a un adolescente afuera del recital de Tiago en el Gimnasio Municipal. 

Lo curioso es que el propio amigo lo delató y lo golpeó para evitar que le quitara el teléfono al chico que hacía fila para ir a ver el recital de Thiago.

Posteriormente, el joven fue descubierto cuando intentaba robar una cubierta de un auto en el centro de la ciudad.

Más tarde, esta persona intentó llevarse sin pagar un pantalón deportivo burlando a una empleada de un comercio céntrico y quedó filmado por las cámaras de seguridad.

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