Mató a su expareja, la enterró en un yacimiento petrolero y le cortó un dedo para desbloquear el celular
Patricia estuvo desaparecida durante dos días hasta que su ex confesó el crimen. En las últimas horas se conocieron macabros detalles del femicidio. Durante las horas que pasaron entre el asesinato y el hallazgo del cuerpo, el hombre trabajó en su herrería, dejó a la hija en común al cuidado de una amiga y envió mensajes desde el celular de la víctima.
Un brutal femicidio ocurrió en la localidad de Catriel, Río Negro. Un hombre confesó que mató a su expareja y enterró su cuerpo en un yacimiento petrolero.
El cuerpo de Patricia Rendón Rodríguez fue encontrado el jueves 29 de junio tras un rastrillaje. Su expareja fue detenido, y en las últimas horas se conocieron más detalles del crimen.
Patricia tenía 31 años y se confirmó que su femicida apeló a macabras maniobras para cometer el crimen. Según el fiscal jefe de Cipolletti, Gustavo Herrera, el imputado Fernando Cronenbold, expareja de la víctima, no sólo ideó el crimen, sino que también intentó ocultarlo y entorpecer la investigación por todos los medios posibles durante unas 24 horas.
La joven permanecía desaparecida desde el martes último pero pocos minutos antes de la medianoche del miércoles, Cronenbold fue detenido, confesó el crimen y se confirmó que el cadáver estaba semienterrado y presentaba signos de violencia.
Durante las horas que pasaron entre el asesinato y el hallazgo del cuerpo sin vida en un yacimiento petrolero, Cronenbold trabajó en su herrería, dejó a la hija en común al cuidado de una amiga y envió mensajes desde el celular de la víctima a su entorno, que para ese momento la buscaba por toda la ciudad.
Fuentes policiales precisaron que para hacerlo le cortó el dedo pulgar de la mano derecha a su expareja y lo utilizó para desbloquear el celular. Incluso tuvo en su poder el teléfono mientras estaba detenido en la comisaría novena de Catriel, señaló Diario Río Negro.
Cronenbold mató - con golpes en la cabeza - a la joven en su casa entre las 8 y las 9 de la mañana del martes 28 de junio, luego envolvió el cadáver en papel film. Antes de enterrarlo en la zona de Puesto Morales, a unos 80 kilómetros de Catriel, buscó a su hija en el colegio y la dejó con una amiga.
Entre las 12 y las 17 del martes cargó el cuerpo en el baúl de su auto Renault Fluence gris y lo llevó hasta el lugar donde finalmente fue encontrado por la Policía.
Cuando regresaba observó un control policial en el acceso sur de la ciudad e intentó fugarse. Fue detenido en el kilómetro 129 de la ruta nacional 151. Tardó unas 24 horas en confesar el femicidio de Rendón Rodríguez y cerca de la medianoche del miércoles dio la ubicación donde había dejado el cuerpo.