CAPITAL FEDERAL (ADNSUR) - El cura Tulio Mattiussi, de 58 años, que había sido detenido en diciembre pasado junto al portero del Jardín de Infantes "Belén", de la localidad bonaerense de San Pedro, luego de que la Justicia constatara denuncias de abuso a nenes de esa institución que dirigía el sacerdote y acusara a ambos de abuso sexual agravado, fue liberado hace una semana. El auxiliar Anselmo Ojeda, en cambio, sigue detenido.
"Queremos que se les garantice a los niños un proceso justo y honesto", reclamó Carla Vitale, madre de una de las víctimas de las orgías organizadas por adultos dentro del jardín parroquial.
La Justicia se nutrió de pericias psicológicas y médicas aportadas por los padres de las víctimas, además de entrevistas con cámara Gesell, según informó Telefé Noticias este martes.
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Un día de 2017 la hija de Vitale se quejó de que le "dolía la cola": una médica pediatra constató lesiones. Después se supo que le introducían lápices.
"Había abusos, orgías que incluían a los nenes y nenas. En varios lugares, en el jardín y en la parroquia. Los adultos mantenían relaciones y hacían que los chicos y chicas del jardín tuvieran sexo oral entre ellos. Los ataban, les pegaban", relató Vitale en diálogo con TN.
Luego de que numerosas evidencias determinaran que la Justicia hiciera detener al portero y al sacerdote a fines de 2018, hace 10 días la Cámara de Apelación y Garantías de San Nicolás ordenó la libertad del cura, que había sido imputado por abuso sexual con acceso carnal agravado y reiterado: no se pudo verificar que hubiera una conexión entre el edificio del jardín y la parroquia, donde los denunciantes aseguran que fueron abusados.
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"La presión de la iglesia y la fuerza de sus contactos hicieron que liberaran al cura y que quede preso el portero con las mismas pruebas", detalló Vitale en contacto con telefenoticias.com.ar.
El presidente de la Cámara, Alberto Moreno, se excusó: es el padre del defensor de Mattiussi, Gustavo Moreno, cuyos honorarios son pagados por el Obispado de San Nicolás.
El obispo de San Nicolás, monseñor Hugo Santiago, apartó al cura del ejercicio del ministerio mientras se sustanciara la causa penal. En misa aseguró ante los fieles que creía en la inocencia de los tres imputados. La tercera imputada es María, la preceptora del jardín.
En marzo pasado Santiago puso en funciones al frente de San Roque al párroco Sergio Bueno, proveniente de la parroquia de Río Tala.
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Fuente: Telefé noticias