Estaba esperando el colectivo, se resistió a un robo y enfrentó a piñas a un ladrón que estaba armado
El hecho quedó registrado por una cámara de seguridad y muestra el momento en que el delincuente finalmente escapó con el teléfono.
La madrugada del miércoles en el oeste de Mar del Plata quedó marcada por un episodio de violencia que resume el clima de inseguridad que atraviesa la ciudad.
Un joven que esperaba el colectivo en la esquina de Gutemberg y Tetamanti, en el barrio Las Heras, fue sorprendido por un delincuente armado que le exigió su teléfono celular. Lo que siguió fue un forcejeo caótico, registrado por cámaras de seguridad, donde la víctima arriesgó su vida para recuperar el dispositivo, mientras el ladrón, aun derribado y golpeado, logró escapar con el botín.
Las imágenes muestran al joven con auriculares y mochila, distraído antes del ataque. El agresor se acerca con una pregunta aparentemente inocua, pero en segundos desenfundó una pistola y ordenó la entrega del celular.
La reacción de la víctima fue inmediata: en lugar de entregar el objeto, forcejeó con el atacante, lo derribó y lo golpeó repetidamente en la cabeza. La linterna del teléfono, encendida durante la pelea, iluminó brevemente la escena como un testigo mudo de la desesperación.
El final fue frustrante. A pesar de los esfuerzos del joven, quien mantuvo su mochila en la espalda durante todo el enfrentamiento como si fuera un escudo simbólico, el ladrón huyó corriendo hacia calles aledañas. Vecinos de la zona, consultados por el medio local 0223, no se sorprendieron:
“Esto pasa todos los días, a toda hora. La gente ya no denuncia porque sabe que la policía no actúa. Es una pérdida de tiempo”, explicó un residente que prefirió mantener su nombre en reserva.
La parada de colectivos, ubicada en una zona residencial pero con escasa iluminación y vigilancia, se ha convertido en un punto crítico. Los testimonios coinciden en que los delincuentes operan con total impunidad, muchas veces armados con cuchillos o pistolas, y eligen a víctimas distraídas o que viajan solas.
El caso no es aislado. Solo en abril, Mar del Plata registró al menos tres robos violentos con características similares. El 6 de abril, una adolescente de 17 años fue amenazada con un disparo al aire por dos hombres en moto que le robaron el celular a dos cuadras de su casa. En otro episodio, un ladrón captado por cámaras mientras asaltaba a una pareja recibió una condena de 3 años y 8 meses de prisión, una pena que los vecinos consideran insuficiente.
