Un conflicto vecinal por intercambio de mensajes y audios de contenido sexual entre dos personas casadas desencadenó en una serie de denuncias mutuas en la comisaría, agresiones verbales y físicas, insultos y un par de matrimonios con una situación complicada por resolver en estos momentos.

El hecho sucedió en Colonia Dora, Santiago del Estero. Según trascendió, el episodio inició cuando una mujer de 31 años descubrió que su esposo se mandaba mensajes con una vecina, de 19, que está casada y embarazada de tres meses, y no lo dudó: fue directo a la casa del matrimonio y aprovechó que la joven había salido un rato para contarle todo al esposo engañado.

La chica había salido de su vivienda para visitar a un “curandero” ya que su pequeño hijo de un año tiene constantes problemas de salud. Al regresar, vio que su marido estaba en la vereda hablando con una de sus vecinas y sospechó lo peor. Dejó la moto, se bajó con su hijo en brazos para entrar a la casa y escuchó la frase de su vecina que desató el escándalo: “Le vine a avisar a tu marido que te mandás mensajes con mi esposo”.

Con su hijo en brazos, relató que no quiso ser parte de la discusión hasta poner en resguardo al menor. Solo buscó esquivar a la mujer e ingresar a su casa. La vecina la tomó de los pelos y la golpeó en el pómulo izquierdo. No conforme con ello, volvió a agredirla en el vientre.

La mujer pretendía seguir golpeando a la joven que, según ella, se hablaba con su marido. Fue en ese instante que su marido intervino para que dejara de agredirla.

Escándalo barrial: Le contó a su vecino que su esposa se escribía con su marido y terminó a las piñas

Tras los golpes, la joven agredida se dirigió hasta la sede de la Comisaría Comunitaria Nº 42, donde realizó la denuncia por el ataque físico. Su principal preocupación era que la trompada en la panza pudiese haber dañado la salud de su bebé.

La vecina, por su parte, también acudió a la dependencia policial, donde manifestó su versión de los hechos en otra denuncia. El relato de ambas coincidió en cuanto a los primeros minutos de la discusión. La joven expresó que hablaba con el marido de ella porque él le decía que no tenía “ningún compromiso”.

La vecina reconoció que la agarró de los pelos y que allí intervino el esposo de la joven y le dio un golpe de puño en la frente a ella, y que el suegro de la mujer fue quien terminó intercediendo.

Las denuncias cruzadas fueron informadas a las autoridades de la Unidad Fiscal Añatuya y se investiga el hecho.

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