COMODORO RIVADAVIA - El autor de los cuatro disparos contra la humanidad de Aldo Núñez (37) estaba identificado ya que tanto en la seccional cuarta como en la Brigada de Investigaciones lograron recibir la denuncia del testigo presencial del ataque ocurrido a eso de las 3 de la mañana donde la víctima quedó tendida y semicubierta por un cerco de rejas negras sobre calle Florencio Sánchez casi Segundo Sombra del barrio Ceferino Namuncurá, aunque la agresión se habría producido unos 50 metros más abajo, cerca de la calle Juan Moreira y en las afueras del domicilio de Nelson Ricardo Alvarado. 

En ese recorrido de 50 metros donde fue perseguida la víctima, la policía científica en una inspección ocular llevada a cabo con las primeras luces naturales del mismo día domingo, lograron secuestrar varias vainas servidas del arma de grueso calibre que afectaron el estómago, la fractura de fémur en una de sus piernas, fractura en el brazo derecho cuyo proyectil también perforó un pulmón y otro de los disparos que le dio en el pecho.

ALLANAMIENTOS Y DETENCIÓN 

Según trascendió, el testigo principal es un familiar directo de la víctima, quien en principio se habría mostrado reacio a aportar datos a los sabuesos policiales. “Esto lo arreglamos de otra manera” habría dicho en principio, aunque cambió de decisión cuando una vez en la guardia del Hospital Regional le fue informado del gravísimo estado de Núñez cuya vida corría serio riesgo.

Los antecedentes no eran los mejores y auguran tiempos de violencia y temor para los vecinos de los protagonistas de los cruentos incidentes, por lo que primando el sano criterio, se informó de la seguidilla de acontecimientos a la Fiscal Dagotto, quien dio su visto bueno y solicitó al juez penal de turno al menos 7 órdenes de allanamientos domiciliarios que se llevaron a cabo en forma simultánea a partir de las 11 de la mañana de ayer: la detención de Alvarado no se hizo esperar y se efectivizó en su casa de la calle Florencia Sánchez casi Juan Moreira. 

Lo llevaron a la seccional Cuarta donde tras los trámites de rigor y para evitar roces con otros detenidos ya que Alvarado está considerado una persona por demás conflictiva, resolvieron su traslado a la Alcaidía policial donde quedó alojado en un lugar de aislamiento. Curiosamente no secuestraron armas ni municiones. De los operativos aparte del personal de la Comisaría Cuarta y la Brigada de Investigaciones, participaron además efectivos del GEOP, Infantería y de Operaciones de la Unidad Regional.

Fuente: Crónica

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