Cayó "Soretito", el peligroso delincuente juvenil acusado de atacar a balazos a un colectivero por plata
El menor de 16 años se había escapado del Instituto de Rehabilitación del Adolescente y fue recapturado este pasado jueves por la noche
Este pasado jueves por la noche, la Policía de Rosario recapturó a Ángel M., conocido como “Soretito”, un adolescente de 16 años sindicado como autor material de los disparos contra un colectivo de la línea 146 en Grandoli y Spiro el 5 de septiembre del año pasado.
El joven se había fugado el martes pasado del Centro Especializado de Responsabilidad Penal Juvenil, ubicado en la zona oeste de Rosario.
LA FUGA Y CAPTURA DE “SORETITO”
La fuga de “Soretito” se detectó durante el recuento de internos realizado por el personal del establecimiento. Aunque no está clara la mecánica de la evasión, la fiscal Luciana Vallarella del Ministerio Público de la Acusación investiga el caso y solicitó revisar las cámaras de seguridad y tomar testimonios. Una hipótesis apunta a que pudo haber escapado por un hueco en un baño, aunque esto aún no fue confirmado.
Cerca de las 22.30 horas, agentes de la Policía de Acción Táctica interceptaron a un joven en avenida Sorrento y Colombia, quien intentó evadirlos y se identificó inicialmente como Ángel G. Tras cotejar sus datos, se confirmó que se trataba de "Soretito”.
El acusado fue trasladado primero a la Seccional 12ª y luego al centro de menores donde quedó alojado nuevamente. La fiscalía de menores fue notificada del procedimiento.
EL VIOLENTO ATAQUE AL COLECTIVO “POR PLATA”
Ángel M. fue detenido en la madrugada del 6 de septiembre de 2024 en un allanamiento en el complejo Fonavi de Sánchez de Thompson al 200 bis. En ese operativo, la policía incautó 39 envoltorios de cocaína, un chaleco balístico, cinco celulares y otros elementos. Fue arrestado junto a su primo Kevin Alfredo Ramos, también imputado en la causa.
El fiscal Franco Carbone imputó a Carlos Jesús “Pelo duro” Fernández, un preso condenado por narcotráfico y balaceras, a Damaris Betania “Pochi” Fernández, a Kevin Ramos y a Brandon Gabriel Moreyra por su participación en el ataque. Según la investigación, Carlos Fernández fue quien ideó el atentado desde la cárcel de Coronda, donde está bajo un régimen de alto perfil con restricciones de comunicaciones y visitas. Se desconoce cómo transmitió la orden a los demás implicados.
Brandon Moreyra habría suministrado la pistola calibre 9 milímetros a Ramos, quien luego se la entregó a “Soretito”. Este se filmó disparando cinco tiros contra el colectivo y envió el video a su primo. Después del ataque, ambos se ocultaron en la casa de Damaris Fernández, quien retuvo el arma. Poco más de una hora después, “Pelo duro” le ofreció a “Soretito” 50 mil pesos para cometer otro atentado mediático.
La recaptura de “Soretito” fue una prioridad para las autoridades locales debido a la gravedad del delito y la vinculación con una banda narco liderada por René “El Brujo” Ungaro. La Justicia dispuso su regreso al centro de responsabilidad penal juvenil para continuar con el proceso judicial correspondiente.
Con información de Rosario 3, editada y redactada por un periodista de ADNSUR
