COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Este martes por la mañana se desarrolló la segunda jornada del juicio oral que ventila los hechos cometidos en marzo de 2018 en perjuicio de un menor de 7 meses de edad, en el barrio LU4 de nuestra ciudad, y que tiene como único imputado a A.E.O (cuyo nombre permanece oculto para proteger la identidad del menor). Varios fueron los testimonios escuchados en la fecha y para mañana miércoles a las 8.00 hs se espera continuar con la prueba testimonial.

El tribunal de debate estuvo conformado por los jueces Daniela Arcuri, Miguel Caviglia y Gladys Olavarría; por el Ministerio Público Fiscal se hizo presente Martín Cárcamo, fiscal general y Lorena Garate, funcionaria de fiscalía; el menor víctima fue representado también por Verónica Roldán, asesora de menores; en tanto que la defensa de A.E.O. fue ejercida por Esteban Mantecón, defensor público.

La primer testigo, una vecina del barrio LU4 recordó que el día del hecho otro vecino le va a golear la puerta de su departamento pidiéndole que por favor lleve al bebé urgente al médico que estaba inconsciente. Su marido lo llevó a EMEC y luego estaban todos los vecinos preocupados a ver qué pasaba con el bebé. Le preguntan al imputado A.E.O. y les refiere que supuestamente su madre se había caído hacía una semana con el bebe en brazos. Luego trasladan al bebe a La Española, que quedó internado para hacer estudios.

Otra testigo vecina del barrio LU4 recordó que toma conocimiento de los hechos por los medios de comunicación. Ella llega y la madre de la víctima estaba tirando piedras hacia la ventana para que le abran la puerta común. Luego comienza a escuchar gritos y sale corriendo la madre del bebe diciendo que su hijo no respiraba, que no sabía que le había pasado.

El tercer testigo toma conocimiento del hecho cuando empieza a escuchar gritos, cuando estaba por subir baja la madre de la víctima con el bebe en brazos que necesitaba que los lleven al Hospital.

La siguiente testigo fue una médica de terapia intensiva pediátrica del Hospital Regional, recordó que el diagnóstico del bebe-víctima al ingresar “Tic grave con síndrome convulsivo, sospecha de maltrato infantil”, primero fue un trauma encefalocraneano y luego sufre una convulsión. La víctima estuvo conectada a un respirador artificial y llevaba 7 días internado. El 28 de marzo de ese año ingresa el paciente al cuidado intensivo, que venía de quirófano. Observó palidez generalizada, con sensorio alternante, hematomas en la zona del cuello lateral izquierdo, con fontanera anterior tensa, se procede a conectarlo, porque su cerebro no funcionaba bien, probablemente por el trauma, aseguró la profesional.

Qué creen los fiscales que sucedió

El ilícito ventilado en debate acontece el pasado 17 de marzo de 2018, entre las 19 y las 20 hs., cuando el menor víctima, de 7 meses de edad, se encontraba recostado llorando en la cama de dos plazas del dormitorio de su madre al cuidado del imputado A.E.O.. En el barrio LU4 de nuestra ciudad. Así en el momento en que la madre del menor se retira a comprar, el imputado a sabiendas que la madre no podía ingresar porque no tenía llaves, provocó diversas lesiones al menor, calificadas como graves ya que pusieron en riesgo la vida del niño. Seguidamente, entre el 21 y 25 de marzo de 2018, se produce un hecho de abuso sexual con los mismos protagonistas. Calificándose provisoriamente el hecho como “lesiones graves, agravadas por haber sido cometidas con alevosía, en concurso real con abuso sexual con acceso carnal, agravado por ser cometido contra un menor de 18 años y por la situación de convivencia preexistente”, en calidad de “autor” para A.E.O..

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