1 Aumenta el rendimiento: muchos de nosotros echamos mano de un pulsómetro para mejorar nuestro rendimiento. ¿Cómo se consigue esto? es muy fácil, una de las ventajas de los pulsómetros es que te permiten elegir distintas zonas de intensidad. Correr a distintas intensidades ayuda a progresar y a trabajar en aquello que necesitas. Además, puedes controlar tu esfuerzo en tiempo real y controlar cuál es tu evolución.

2 Controla el gasto de calorías: este es uno de los motivos más importantes por los que se adquiere un pulsómetro. Conocer el número de calorías que se queman al entrenar ayuda a controlar una dieta y motiva mucho. La verdad es que si buscas perder peso, un gadget como éste puede llevar a ser una excelente herramienta.

3 Ayuda a alcanzar los objetivos: un pulsómetro funciona como un entrenador personal, te acompaña y te guía a través de los entrenamientos. La información relativa a las pulsaciones, la intensidad y la distancia ayuda a alcanzar las metas con mayor facilidad.

4 Mide tu frecuencia cardíaca máxima: esto lo tenemos claro, no es ninguna sorpresa, pero ¿para qué sirve? la frecuencia cardíaca es un factor que nos indica cuál es nuestro estado de forma. Gracias este dato podemos saber qué esfuerzo estamos realizando y hasta dónde podemos llegar. Este punto es bueno para progresar como runners y también para evitar problemas de salud.

5 Motivación: cuando sales a correr con un pulsómetro descubres que es muy fácil controlar tu entrenamiento y tu evolución. Resulta muy motivador ver cómo vamos mejorando, competir contra uno mismo y alcanzar las metas.

Claves para adquirir un pulsómetro

Una vez que tenemos claros cuáles son los beneficios de usar pulsómetro, toca ver algunos consejos a la hora de adquirir el vuestro:

No te dejes llevar por el precio. En el mercado puedes encontrar pulsómetros  a distintos precios, muy caros y muy baratos. Normalmente el precio está en función de la marca y de las funciones que tenga el aparato. Infórmate de cuáles son tus necesidades reales y elige uno en consecuencia. No te gastes un dineral en un pulsómetro que no vas a rentabilizar.

Cuidado con la estética. Existen pulsómetros muy vistosos y de gran diseño que enamoran a la vista pero dejan mucho que desear. No olvidemos que un pulsómetro es una herramienta de trabajo. Su función es la de medir nuestro rendimiento.

Cuanto más sencillo mejor. A veces elegimos aparatos electrónicos que son muy complejos porque creemos que son más completos. Hay que tener presente que mientras practicamos running debemos estar concentrados para no perder el ritmo. Aconsejamos que elijas un pulsómetro que se lea bien y sea fácil de manejar.

Fuente: https://www.streetprorunning.com

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