¿Qué es el carry trade? La estrategia que volvió a tomar protagonismo tras el nuevo régimen cambiario
Con una nueva banda de flotación entre $1.000 y $1.400, inversores y analistas vuelven a poner el ojo en una táctica que promete grandes retornos, pero también exige precaución.
Luego de que el Gobierno anunciara la implementación de un nuevo régimen cambiario en el país, con una banda de flotación entre los $1.000 y $1.400, se reactivó el interés por el carry trade, una estrategia financiera que busca aprovechar el diferencial entre la tasa de interés local y la evolución del tipo de cambio.
En un escenario donde el Banco Central solo interviene dentro de ciertos márgenes, la rentabilidad que ofrece esta práctica resulta atractiva. Sin embargo, la alta volatilidad del mercado obliga a no perder de vista los riesgos asociados.
Cabe recordar que el carry trade consiste en vender dólares, invertir los pesos obtenidos en instrumentos que pagan intereses más altos y postergar la recompra de divisas, esperando que el dólar se mantenga estable. Si esa condición se cumple, la ganancia puede ser significativa en dólares.
En Argentina, esta estrategia se ejecuta principalmente en pesos. Los instrumentos más utilizados incluyen Lecap, Boncap, plazos fijos, cuentas remuneradas y Fondos Comunes de Inversión del tipo money market, que ofrecen tasas notablemente superiores a las internacionales en dólares.
CUÁLES SON LAS OPCIONES MÁS UTILIZADAS EN EL MERCADO
Entre los bonos más elegidos para aplicar esta estrategia están las Lecap y los Boncap, que ofrecen retornos fijos a corto y mediano plazo. Pero también existen alternativas para inversores menos especializados, como las billeteras virtuales, los fondos de inversión o los “frascos” de Naranja X.
Por ejemplo, en Ualá, un plazo fijo a 365 días con una TNA del 40% permite obtener $400.000 por cada millón invertido, si el dólar se mantiene en $1.000. En Naranja X, los rendimientos van desde $5.562 en 7 días (TNA del 29%) hasta $28.383 en 28 días (TNA del 37%).
Por el lado de los bonos, el Boncap T15D5 podría rendir un 12% en dólares si al vencimiento el tipo de cambio está en $1.400. Allaria estima que, si se mantiene en $1.000, la rentabilidad se elevaría al 44%. Otro ejemplo es el S30J5, con vencimiento en junio de 2025, que proyecta un 25% de rendimiento si el dólar se mantiene cerca del piso de la banda.
A más largo plazo, el TTD26 —con vencimiento en diciembre de 2026— aparece como el más rentable: podría rendir un 91% en dólares si el tipo de cambio se mantiene en $1.000, y un 36% si sube a $1.400.
No obstante, a pesar del atractivo que ofrecen estas inversiones, los analistas advierten que el carry trade implica una exposición considerable al riesgo cambiario. Desde Quantum Finanzas señalan que si el dólar toca el techo de $1.400, es posible perder todo lo ganado en pesos e incluso quedar en rojo en dólares.
PPI agrega que el ingreso de capitales especulativos, incentivado por nuevas medidas del BCRA y la liquidación de la cosecha gruesa, podría seguir empujando al dólar hacia el piso de la banda. No obstante, un cambio inesperado en el contexto local o internacional podría alterar el equilibrio.
En esa línea, JPMorgan advierte que los bonos de mayor plazo pueden ser más volátiles. GMA Capital, por su parte, subraya que la amplitud de la banda cambiaria exige una vigilancia constante: un salto en el tipo de cambio puede convertir una estrategia rentable en una pérdida sustancial.
Con información de iProfesional, redactada y editada por un periodista de ADNSUR
