Fútbol Para Todos tiene fecha de vencimiento
El fútbol dejaría de ser gratis a partir del 1° de enero del próximo año.
CAPITAL FEDERAL - Es un secreto a voces y todavía no habrá anuncio oficial, pero con la Comisión Normalizadora en funciones se habría decidido romper el contrato con el Estado y negociar con privados. El fútbol dejaría de ser gratis a partir del 1° de enero del próximo año.
Los meses que restan de 2016 podrían ser los últimos del Fútbol para Todos. Ante la negativa del Gobierno de aumentar el monto ofrecido a los clubes, el vínculo podría romperse el 31 de diciembre de este año para que, a partir de 2017, sean prestadores privados los encargados de televisar el torneo.
El Ejecutivo no destinará más de 2.500 millones de pesos anuales para la televisación del fútbol. Según trascendió, fue el propio Mauricio Macri quien se lo confirmó a Armando Pérez, flamante presidente de la comisión normalizadora designada por la FIFA. La cifra está lejos de conformar a los clubes, que, reunidos en la tarde de este lunes para tratar la Superliga, ya comenzaron a esbozar un futuro en el cual la televisación del fútbol esté en manos privadas.
Aunque no se alzaron voces oficiales al respecto, la salida sería acordar con el estado nacional la continuación del contrato a cambio de 1.250 millones de pesos. Y, mientras tanto, los clubes negociarán con el sector privado los derechos a partir de 2017. Hasta ahora, la empresa norteamericana Turner es la posibilidad más firme.
"El gobierno tiene un precio y nosotros pedimos más. Si vamos a licitación va a ser superior", explicó Víctor Blanco, presidente de Racing, al salir de las oficinas de la AFA. "No puedo asegurar que el fúbol siga gratis”, agregó el dirigente.
“Hay que analizar si el fútbol alguna vez fue gratis”, deslizó, por su parte, Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes y señalado para presidir la nueva Superliga. A su vez Claudio Tappia, presidente de Barracas Central, admitió que se evalúa "la posibilidad de rescindir el contrato" del Fútbol Para Todos.
Fuente: Clarín