Desde Chubut al Monumental: Martín Iraola y Matías Marín, los profes que representan a Comodoro y Río Mayo en River femenino
Martín Iraola y Matías Marín, dos preparadores físicos nacidos en Chubut, forman parte del cuerpo técnico de la Primera División de fútbol femenino de River Plate. Amigos y colegas, comparten la gestión física del plantel y viven con orgullo esta etapa profesional que los trajo de regreso a casa.
(Pasta de Campeón - ADNSUR) - La pretemporada de River Plate femenino en Comodoro Rivadavia no solo marcó un momento especial para el fútbol local, sino que también trajo de regreso a dos protagonistas muy queridos por la comunidad deportiva chubutense: Martín Iraola, nacido y criado en Comodoro, y Matías Marín, oriundo de Río Mayo y formado en USMA, quienes hoy comparten el rol de preparadores físicos en uno de los clubes más importantes del país.
Ambos se reencontraron con sus raíces desde un nuevo lugar: con el escudo de River en el pecho, liderando la preparación del plantel profesional femenino que se entrena en la ciudad.
“Estar en un lugar que tiene objetivos grandes es muy importante. Y traer a una institución como River a nuestra provincia, para que las chicas entrenen acá, nos llena de orgullo”, expresó Marín, quien llegó al club en enero y rápidamente sumó a su amigo y colega al proyecto.
Matías dejó Río Mayo para sumarse a Sarmiento y luego a USMA, donde se inició como jugador y dio sus primeros pasos como profe. Trabajó en Belgrano de Córdoba, Nueva Chicago y Real Pilar, hasta que le llegó la oportunidad de integrar el cuerpo técnico de River.
“Cada vez que nos juntábamos con Martín a tomar mates en Buenos Aires hablábamos sobre si volvíamos a Comodoro o seguíamos intentando allá. Y en el medio surgió esta oportunidad hermosa”, contó emocionado.
El miércoles, las chicas de River disputaron un amistoso contra la séptima división de USMA y ese momento fue de total alegría y emoción para Matías: “En un momento del partido me vi con mi viejo, que es profe, yo con la ropa de River y en con la de USMA, ahí sentí mucha alegría y me emocioné micho. Comodoro nos adoptó a toda la familia y USMA por sobre todas las cosas nos terminó adoptando a todos”.
Para Martín Iraola, la emoción del regreso también fue intensa. “Es un orgullo, siendo profes del interior, llegar a una institución como River. Siempre cuesta todo un poco más, pero hoy lo estamos disfrutando mucho y queremos abrir puertas para que más colegas de Comodoro tengan oportunidades como las nuestras”, reflexionó.
Martín se formó en Petroquímica, el club de su vida. Jugó también en Jorge Newbery, Rada Tilly, USMA y Ameghino, y como profe trabajó en River y Belgrano Athletic (hockey femenino).
Volver al barrio, ver a su gente, reencontrarse con compañeros y ex profes, lo llenó de emoción. “Petro es mi casa, me dio todo. Incluso me dio la chance de jugar con mi primo Nicolás García. Cada vez que vuelvo, paso aunque no haya nadie. Me crie ahí”, contó quebrado.
“Para nosotros es muy lindo volver a nuestra ciudad, reencontrarnos con profes que tuvimos en el instituto como en nuestro recorrido en el futbol, volver a las canchas en las que jugamos, gente que vimos en otros momentos y que hoy nos vienen a ver y saludar. Sabemos de que están orgullosos de que estamos en este lugar y poder traer a River a nuestra ciudad para nosotros es un orgullo gigante”, remarcó Iraola entre lágrimas.
La visita de River Plate a Comodoro fue mucho más que una pretemporada: fue el regreso de dos pibes de la Patagonia que hoy viven su sueño profesional en Núñez, y que eligieron volver, aunque sea por unos días, al lugar donde todo empezó.
