COMODORO RIVADAVIA (ADNSUR) - Tras el temporal, los robos: vecinos de la calle Honduras de Laprida plantearon al secretario a cargo del área de Seguridad municipal, Héctor Quisle, la necesidad de reforzar la seguridad en el sector ante los asaltos registrados en las viviendas que permanecen sin sus dueños, luego de quedar afectadas a por las lluvias y el alud de barro.
"Esto no nos puede pasar. Encima de la tragedia que vivimos, sabemos de vecinos que vuelven a sus casas para seguir sacando barro y encuentran con que les faltan cosas", aseguró una vecina a ADNSUR.
El encuentro con Quisle se desarrolló este viernes. La necesidad de sumar presencia policial se planteó además desde otros sectores de la comunidad. Según admitió el jefe de la Unidad Regional, Claudio Cretton, el alerta obligó a reforzar controles en los barrios mas golpeados por el temporal, en coordinación con personal de Gendarmería y del Ejército.
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El alud de agua y barrio convirtió a la calle Honduras en una de las mas golpeadas por el temporal. Las familias tuvieron que abandonar sus casas debido a la avanzada del cerro. Los robos se producen "mientras intentamos reconstruir y recuperar lo poco que nos queda", relató la vecina.
HISTORIAL
Los vecinos del barrio Laprida apuntaron al "Pitu" Almonacid y su entorno. El joven, con antecedentes policiales, volvió a ser noticia en mayo último, luego de que decidiera “quemar el botín” que habría conseguido en diversos robos, ante el aviso de que la policía gestionaba una orden judicial para avanzar con un allanamiento.
El hecho ocurrió en el domicilio de “Pitu” Almonacid, de amplios antecedentes policiales, donde se secuestró diversos elementos robados, informó diario Crónica.
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Almonacid, con amplios antecedentes policiales, tiene atemorizada a gran parte del barrio Laprida a partir de los múltiples hechos delictivos de los que son víctimas los vecinos del sector, lo que incluso motiva que ya no denuncien las andanzas del mismo por temor a represalias.
En mayo pasado, personal policial de la Comisaría Laprida decidió iniciar una causa de oficio contra el individuo y tras recolectar el material necesario se pidió una orden de allanamiento que se hizo efectiva en el domicilio de Almonacid ubicado en Montevideo 425.
Al arribar, el personal pudo secuestrar documentación a nombre del damnificado, diez tarjetas de crédito, que incluso momentos antes el sujeto había arrojado fuera de la vivienda; una billetera color negro y rojo, una réplica de un arma de fuego y dos cartuchos a bala.
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Pero además se pudieron identificar otros elementos sustraídos en otros hechos delictivos cometidos presuntamente por Almonacid por lo que se solicitó una ampliación al juez de turno para poder secuestrar también dichos objetos.
